A la sociedad vasca le importa mucho más las cosas del comer que el politiqueo, la independencia o todo eso que solemos contar en primera página los periódicos. Esta semana conocíamos los datos del Sociómetro. Y según esta encuesta que elabora el Gobierno vasco, lo que más preocupa a los vascos es el mercado de trabajo, el funcionamiento de Osakidetza, la vivienda y otros asuntos económicos.
En el Sociómetro está la voz de los vascos. Si se les pregunta por la independencia, resulta que las ganas de independizarse está en un 23%. Si se les pregunta por cómo de abertzales se sienten, el resultado es un cinco, es decir, ni para un lado ni para otro. Cuando se les pregunta sobre los asuntos que más les importan en su día a día, mencionan otros, como ya decíamos. Y, además, el 65% de la ciudadanía afirma tener poco o ningún interés en la política.
Estos datos son muy importantes porque llegan a pocas semanas para las esperadísimas elecciones autonómicas vascas que casi con toda seguridad se celebrarán el 21 de abril, como ya publicó este diario. Por cierto, y este es otro dato del Sociómetro, a los comicios concurren unos candidatos más desconocidos que nunca, porque la abrumadora mayoría no sabe bien quién es Pello Otxandiano, candidato de Bildu, ni quién es Imanol Pradales, candidato del PNV, los dos con más opciones de victoria en las urnas. Mejor situados están, aunque tampoco para tirar cohetes, Eneko Andueza, del PSE, y Miren Gorrotxategi, de Sumar, ambos por delante de Javier de Andrés, del PP.
De todos estos datos, uno de los más llamativos es que Osakidetza se consolide como el segundo problema para los vascos. Algo que desde la pandemia hasta ahora ha crecido muchísimo. Y que evidencia casi mejor que cualquier otra respuesta de la encuesta qué le preocupa de verdad a los ciudadanos.
Todo esto demuestra que las prioridades de los partidos en campaña debieran ser otras. Quizás la Euskadi publicada, la de la opinión pública que construimos los medios, no es la Euskadi real, la de las preocupaciones de la gente. Así, tal y como venimos demandando aquí, en estas elecciones vascas los candidatos tienen que poner sobre la mesa propuestas para mejorar, resolver o construir sobre lo que inquieta a la sociedad.
Resolver los problemas de Osakidetza, mejorar la situación de la vivienda, ayudar a los trabajadores y las empresas o construir alternativas para todas estas y otras preocupaciones ciudadanas es más importante que cualquier debate identitario. Seguramente el 'procés' catalán es lo que ha vacunado a Euskadi para que la gente no quiera embarcarse en aventuras soberanistas...
En todo caso, estos datos muestran que la Euskadi real es diferente a lo que se suele creer o publicar. Y, por ello, estas elecciones deberían centrarse en los problemas que de verdad le importan a la gente.