Sortu se desvincula de la huelga de hambre del preso de ETA Iñaki Bilbao

Sortu se desvincula y dice que "no apoya" la huelga de hambre y sed iniciada por el preso de ETA Iñaki Bilbao, "Txikito". Opinan que "no tiene ningún sentido, ni recorrido en la medida en que carece de interpelaciones o peticiones materializables". El partido ha ido más allá y ha asegura que la protesta del recluso de ETA "no tiene nada que ver ni con la cultura política de la izquierda abertzale, ni con las formas concretas mediante las que este movimiento ha materializado su compromiso con el pueblo" vasco.

No obstante, Sortu dice que, "tanto desde un punto de vista revolucionario como desde uno meramente humano", no le resulta "indiferente" que un preso de ETA haya tomado "una decisión de tales consecuencias", de la misma manera que tampoco le resultaría "indiferente" su "hipotético fallecimiento", que desea "rotundamente" que no ocurra.

Recuerda que Iñaki Bilbao, quien cumple condena en la cárcel gaditana de Puerto III, inició el pasado 2 de noviembre una huelga indefinida de hambre y sed después de haber realizado una de hambre y comunicación entre el 9 de septiembre y el 29 de octubre en defensa de "la independencia y el socialismo". Sortu opina que planteada de esta manera, esta iniciativa "solo tiene un final posible: la muerte de Iñaki" y reitera su deseo de que la protesta tenga un "desenlace bien distinto al mencionado".

El partido asegura que "seguirá defendiendo los derechos de todos los presos, exiliados y deportados vascos", también en el caso de aquellos que, como Iñaki Bilbao, "hace tiempo que abandonaron tanto el colectivo de presos y exiliados políticos como la izquierda abertzale". Aprovecha la ocasión para criticar "la política penitenciaria de excepción que aplica el Estado" a los presos de ETA y sus "consecuencias".

Bilbao Goikoetxea cumple 45 años de condena por el asesinato del concejal socialista de Orio (Gipuzkoa) Juan Priede, y acumula otros 14 años de reclusión por las amenazas vertidas contra varios jueces. El recluso no pertenece a la disciplina del colectivo de presos de ETA (EPPK), sino que está inmerso en el grupo disidente ATA, crítico con la estrategia seguida por la izquierda abertzale respecto a los presos de la organización terrorista. EFE