El alquiler y el reto de la emancipación juvenil, dos piedras en el camino del Ejecutivo vasco

El Ejecutivo del lehendakari, Íñigo Urkullu, afronta este viernes una sesión de control en la que, a primer vista, uno de los principales temas a tratar estará relacionado con el acceso a una vivienda y a un alquiler asequibles; y a la capacidad de la juventud vasca para emanciparse con unas condiciones dignas.

No es un secreto que el acceso a la vivienda es uno de los principales baches que debe afrontar la sociedad de Euskadi en particular y de España en general, y así se refleja en las intervenciones de los diferentes grupos políticos que componen el Parlamento vasco. 

En este caso, son por lo menos tres las preguntas dirigidas al lehendakari y su equipo de gobierno, especialmente al consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola, las que abordan, después de meses en el debate social, temas como el encarecimiento de la vivienda y el acceso a un alquiler que no suponga el 50%, o más, del sueldo de un ciudadano medio. 

Así, entre las cuestiones que se abordarán, el propio grupo jeltzale recuerda que en octubre, el Gobierno vasco aprobó la orden de alquiler asequible, un instrumento “que busca incentivar la construcción, por parte de promotores privados, de viviendas en régimen de alquiler para rentas medias inscritas en Etxebide”. 

El consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola. / IREKIA

Topes al alquiler y rentas de hasta 39.000 euros

Por su parte, cuatro meses después de su aprobación por el Consejo de Gobierno, el PSE-EE plantea al consejero Arriola una cuestión sobre los resultados obtenidos por su departamento “tras la creación de la especialidad del alquiler asequible”, para nucleos convivenciales con rentas de hasta 39.000 euros anuales.

También al consejero Arriola se dirigirá EH-Bildu a través de su parlamentario Unai Fernández, refiriéndose al programa denominado Hitzartuz, anunciado en septiembre del pasado año, y por el cual se plantean ocho medidas, entre las que, como destacan, una de ellas hace referencia a la “flexibilización del límite de ingresos para viviendas sociales”.

Una medida que, según declaraciones de Arriola en septiembre del pasado año, consistiría en una actualización de los topes para el reconocimiento del derecho subjetivo a la vivienda.

Sin embargo, como recuerdan desde Bildu, “han pasado casi cuatro meses desde este anuncio y, por lo tanto, a día de hoy se siguen aplicando los topes calculados en 2015, que son muy bajos”, y ante lo que preguntan al consejero, si considera “adecuado”, que la ciudadanía “tenga que esperar tanto tiempo” la actualización de los topes acordados previamente.

Todas estas cuestiones se producen en el contexto de la sociedad vasca, la cual cuenta con una de las ciudades más caras de España en lo que a vivienda se refiere, y con algunas de las calles, donde tanto el alquiler como la compra superan, de lejos, la media nacional.  Una situación que no permite emanciparse a la gran mayoría de jóvenes de la comunidad, pese a las ayudas aprobadas por el Ejecutivo. Aunque muchas de ellas, todavía no han visto la luz.