Últimamente la política vasca, por lo menos en el caso de la izquierda más allá del Partido Socialista, parece estar en una dinámica totalmente diferente a la que nos tienen acostumbrados la política nacional. Si en Madrid, de cara a las elecciones del 28 de mayo y a las generales de final de año, parece que la pugna entre los diferentes grupos políticos que conforman la izquierda “progresista” es cada vez más acentuada, en Euskadi parece ocurrir lo contrario.
Con los comicios forales y municipales a escasos dos meses, en la Comunidad Autónoma Vasca hay ya una candidatura común que integra a nada menos que cuatro formaciones políticas distintas: Podemos Euskadi, Anitza-IU, Alianza Verde y Berdeak Equo, que si bien tienen unas bases bastante similares, siguen encontrando y demostrando sus diferencias constantemente.
Está claro que hay que hacer de la necesidad virtud y todos estos partidos son conscientes del espacio electoral que progresivamente están perdiendo a causa del viraje, cada vez más a la izquierda, de EH-Bildu. Saben que con una candidatura conjunta la posibilidad de perder representación en las instituciones es menor, y esta es, precisamente, la intención con la que nace Sumar, el nuevo proyecto político de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que va a ver en Euskadi una perfecta prueba piloto de cómo podría funcionar su propuesta en las próximos comicios generales.
Un espacio de la izquierda "no nacionalista"
Falta, de hecho, una semana para que la vicepresidenta lance oficialmente su proyecto a la ciudadanía española, una nueva confluencia de fuerzas de izquierda, “progresistas”, “ecologistas” y “no nacionalistas”, que en Euskadi tratará de abrirse un hueco entre el PSE-EE y la coalición soberanista, para no verse relegada a un segundo plano, como denota la sensación general de la ciudadanía.
Yolanda Díaz es consciente de que este nuevo proyecto tiene muchos detractores en el seno de Podemos, pero sabe que tiene tiempo hasta las generales para convencer a todas las formaciones posibles para presentarse dentro del espacio que ella propone. Además, cuenta ahora con el ejemplo de Euskadi como un escenario de pruebas en el que casi todos los partidos de esta vertiente política, con la principal excepción de Más Euskadi-Euskadi Eraiki, se presentan juntos.
Es verdad que la plataforma de Íñigo Errejón no presenta candidaturas este mayo y se centra más concretamente en las próximas elecciones generales y en las autonómicas que se celebrarán en Euskadi previsiblemente en la primavera de 2024, pero viendo la complicidad que desde hace tiempo el cofundador de Podemos muestra con Yolanda Díaz, a nadie le llegaría a extrañar que Más País acabara por sumarse al proyecto de la ministra de trabajo.
De hecho, la relación entre ambos es, a simple vista, bastante más cordial de la que parece haber entre Díaz y otras líderes de la formación morada como Ione Belarra o Irene Montero. Aunque las sensaciones cambian si nos centramos directamente en Euskadi, donde algunas de las principales figuras de Podemos, como la secretaria general del partido en Pais Vasco, Pilar Garrido, y la portavoz parlamentaria, Miren Gorrotxategi, muestran su apoyo hacia este proyecto. De hecho, ambas dirigentes vascas ya acudieron a la presentación del proyecto en Euskadi el pasado mes de septiembre.
Proyecto para ganar un país
Tal es el altavoz que están teniendo a día de hoy Yolanda Díaz y su plataforma, no hay más que ver el tratamiento que recibío la pasada semana durante la moción de censura de Vox, que la vicepresidenta este domingo, en un acto en Canarias, ha asegurado que Sumar es un "sueño en el que no sobra nadie" y ha señalado que "tiene proyecto para ganar un país".
Este era el último acto de Sumar antes del próximo 2 de abril, cuando la ministra de Trabajo anunciará oficialmente su candidatura para la Presidencia del Gobierno de España. En ese marco Díaz ha abierto la puerta a todas las formaciones políticas -de su espacio ideológico, evidentemente- para unir fuerzas. Así, ha asegurado que en su plataforma tendrá cabida todo el mundo "piense lo que piense, porque no se le pide carné a nadie".
Ante más de 500 personas y representantes de diversas formaciones políticas como Equo, Podemos e Izquierda Unida, y también junto a los sindicatos UGT y CCOO, ha señalado que "lo importante es demostrar a este país que aunque tengamos matices, la diversidad es riqueza".
Aunque todavía es pronto para hacer una valoración del todo fundada, todo parece indicar que el camino de Yolanda Díaz y Sumar no va a contrar con demasiadas adversidades, no por el apoyo social, elecotral o político, sino porque está consiguiendo mostrar una tónica distinata a la que nos acostumbra una izquierda cada vez más sesgada y distanciada. Aunque en Euskadi todavía la concordia y la unidad son tan evidentes como curiosas.