Urkullu aviva su guerra contra ELA, LAB y Bildu por difundir una imagen "catastrofista" de Euskadi

El lehendakari, Iñigo Urkullu, puede haberse quedado fuera de la lucha por el poder en las próximas elecciones autonómicas, pero esto no significa que en los pocos meses que le quedan al frente del Gobierno vasco, vaya a rebajar el tono 'bronco' que había adoptado en los últimos meses en defensa de su gestión y de las acciones que su Ejecutivo ha llevado a cabo durante sus tres mandatos.

Especialmente en referencia al actual clima de protestas que vive Euskadi. Comunidad autónoma que, como ha lamentado este lunes el lehendakari durante su intervención en el foro económico organizado por 'El Correo' y el Banco Santander, tiene "el triste honor de sufrir el 50% de las huelgas de todo el Estado". Un panorama, a su juicio, "más desolador, si cabe" cuando algunos de los agentes sindicales, en alusión a ELA y LAB, aunque no los has citado, "se enorgullezcan de ello". 

De hecho, el lehendakari, en referencia a este contexto, ha acuso a estos dos sindicatos de llevar a cabo una estrategia "deliberada" junto a Sortu (la principal fuerza política de EH-Bildu) para mostrar al exterior una imagen "catastrofista y negativa" de la realidad vasca que "nada tiene que ver" con la que se vive en el País Vasco. 

Según ha denunciado Urkullu, con el significativo aumento de las huelgas y la conflictividad social y laboral que estas provocan, los sindicatos de forma "incomprensible" han convertido esta medida que debería ser "excepcional" en su práctica más habitual. Dando prioridad a la huelga y luego a "todo lo demás". 

Manifestación por las calles de San Sebastián / JAVIER ETXEZARRETA - EFE

Conflicto con gran recorrido

No es la primera vez que Urkullu se pronuncia en contra de las movilizaciones, protestas y huelgas organizadas por los sindicatos de la conocida como "mayoría sindical vasca", y con el habitual apoyo de EH-Bildu. Ya lo hizo junto al presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, durante el Alderdi Eguna, y antes de ello durante el pleno de Política General que marcó el inicio de este curso político. 

Desde entonces, son muchas las huelgas que han afectado a Euskadi en sectores como la educación, la sanidad y la industria vasca, y más recientemente, la huelga feminista que se llevó a cabo el pasado jueves 30 de noviembre. Un parón que, de hecho, fue convocado por los sindicatos ELA, LAB y Steilas, y que recibió un fuerte apoyo por parte de EH-Bildu y Elkarrekin Podemos-IU, cuyos parlamentarios decidieron, en su inmensa mayoría, ausentarse del pleno ordinario programado para aquella jornada. 

Incluso, el lehendakari ha llegado a valorar que todo este clima de tensión "responde" y "coindice" con el "plan político de Sortu 2023-2024". Un proyecto que, según ha denunciado Urkullu, contemplaba por escrito la huelga del pasado jueves y cuyo fin último es desprestigiar al PNV, y lograr así su "asalto al poder".