El PNV ata el alivio fiscal a Iberdrola y Petronor y se anota el tanto del contrato relevo

El PNV amarra una demanda relevante para dos empresas tractoras de Euskadi como son Iberdrola y Petronor en el acuerdo para aprobar el decreto de medidas anticrisis de Pedro Sánchez. Los nacionalistas logran que el nuevo impuesto a banca y energéticas pueda ser gestionado desde las haciendas forales vascas (también la navarra), a las que contribuyen ambas dos compañías, además de cerrar con Sánchez una prórroga de un año en el contrato de relevo.

EH Bildu avanzaba ayer martes un acuerdo con el Ejecutivo central para evitar desahucios de personas vulnerables a cambio de validar el decreto de ayudas anticrisis. Un día después la formación que encabeza Andoni Ortuzar hace lo propio y saca músculo con dos medidas de impacto en Euskadi: una de corte más empresarial que de alguna forma suaviza el impacto fiscal que tendrán las medidas de Madrid sobre grandes energéticas, entre ellas Petronor e Iberdrola, y por otro lado una de calado más social como es la continuidad del contrato de relevo.

En el primer caso el PNV ha anunciado que con el acuerdo los nuevos gravámenes a grandes empresas "se convertirán en tributos y se concertarán y convendrán con las haciendas forales". Dicho de otra forma, se podrán articular desde las haciendas vascas medidas para paliar el impacto final de estos tributos sobre beneficios extraordinarios, según se ha indicado a través de incentivos especiales a las inversiones.

Hay que recordar que la propia Petronor ha advertido de que está en riesgo el ciclo de inversiones en hidrógeno verde a causa de la presión fiscal anunciada por el Gobierno de Sánchez, con lo que en caso de mitigarse finalmente la recaudación por esta vía podría quedar subsanado el desencuentro y completarse así el proyecto base sobre el que descansa el Corredor Vasco del Hidrógeno.

Primer electrolizador de Petronor en Muskiz. Petronor

Relevo

Asimismo el PNV ha anunciado como un compromiso cosechado en sus negociaciones con Sánchez la continuidad un año más del contrato de relevo, algo que en todo caso se daba por hecho. Este sistema de reemplazo progresivo de trabajadores es básico en la industria y grandes empresas vascas llevan tiempo pendientes de la prórroga en 2024 porque tienen recogidos una serie de compromisos en sus convenios para los próximos ejercicios.

Sin ir más lejos ha habido secciones sindicales en fábricas vascas, caso de Mercedes Vitoria, que hace tiempo han anunciado internamente que el contrato de relevo se prorrogará un año más. De hecho es este un aspecto que Madrid viene negociando con los sindicatos CCOO y UGT, con lo que la inclusión en el acuerdo con los de Andoni Ortuzar no deja de ser cuanto menos sorprendente. Ya ocurrió con la prevalencia de los convenios vascos que CCOO y UGT protestaron porque se pactase esta medida a nivel político y no en el seno del diálogo tripartito con los agentes sociales.