Bildu pide "redemocratizar" España y el PNV quiere "volver al trabajo" tras el amago de Sánchez

Hace ya una semana, desde que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, publicara aquella carta en X (Twitter) donde se daba cinco días "para reflexionar" sobre su continuidad en la Moncloa. Un movimiento que el exalcalde de Vitoria y portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto, valoró como "la enésima pirueta" del dirigente socialista; al tratarse de un suceso inaudito que hasta este lunes, cuando el presidente ya confirmó su permanencia, tuvo en vilo no solo al PSOE, sino también a sus socios de Gobierno. Entre ellos PNV y EH Bildu. 

Terminado ya este periplo. Con Sánchez afrontando la legislatura "con más fuerza sí cabe", como él mismo dijo ante los medios de comunicación, toca ahora pasar página y volver al día a día tras una 'crisis' que para muchos ha creado y disuelto por el propio presidente del Gobierno. Un suceso que en Euskadi algunas formaciones como Bildu están aprovechando para reabrir un debate sobre la calidad del actual estado democrático que, a su juicio, está apoyado en lo que ellos definen como "el régimen del 78". 

La coalición soberanista, uno de los partidos en mayor sintonía con Sánchez desde su primera investidura en 2018, apenas se ha mostrado crítica con la forma en la que el líder socialista ha manejado esta situación; ni tampoco ha abordado la investigación contra su mujer, Begoña Gómez, por un presunto delito de Tráfico de Influencias y Corrupción en los negocios. Su principal valoración de todo este caso ha llegado una vez Sánchez confirmó su permanencia en el Gobierno. "Una buena noticia" según celebró la diputada de Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, porque "primera vez" se ha abordado "esa necesaria regeneración pendiente que tiene el Estado español".

En una entrevista para Radio Euskadi, la representante de la formación abertzale en Madrid señaló que el presidente del Gobierno está ahora ante una "oportunidad histórica" para abordar "esa democratización profunda que tiene que abarcar a todos los aparatos del Estado". A su juicio una "asignatura pendiente desde 1978", sin la cual "no va a haber realmente una democratización del Estado".

"Ofensiva de la derecha reaccionaria"

Aizpurua se mostró en sintonía con las denuncias lanzadas por Sánchez tanto en su carta, como en su intervención del lunes y en la entrevista que más tarde realizó en RTVE. Un encuentro que tanto el PP como ERC han llevado a la fiscalía, y donde el dirigente socialista denunció el "lawfare" y los escraches constantes que él y su mujer han sufrido "los últimos diez años", por parte de "pseudomedios de comunicación" y ciertos sectores del poder judicial.

Así, aunque la diputada soberanista aseguró que este tipo de ataques se están llevando a cabo "desde el inicio de esta legislatura, con una agresividad inusitada" y reclamó "contenidos y medidas" contra quienes "intentan impedir cualquier decisión democratizadora, y boicotear una legislatura que traiga avances nacionales y sociales"; mostró su disconformidad con que Sánchez no pusiera sobre la mesa "iniciativas concretas" para luchar contra la "ofensiva política, judicial y mediática de la derecha reaccionaria".

También desde la coalición abertzale, otro de sus diputados, Oskar Matute, se ha pronunciado sobre lo ocurrido estos últimos cinco días. El dirigente del Alternatiba, uno de los partidos que componen Bildu, señaló en Radio Nacional que "hay un elemento positivo en todo lo que ha ido señalando el presidente", y llamó a "regenerar" el sistema democrático. Aún así, recordando las autonómicas vascas del pasado 21 de abril, incidió en que "ninguno de los líderes políticos que han estado en liza" en estas elecciones serían capaces de "volcar su realidad a una situación como la que se ha vivido en Madrid los últimos cinco días". 

Matute, además, en otra entrevista para Onda Vasca, llamó a llevar a cabo los cambios prometidos por Sánchez en su intervención. "Si al final nos quedamos solo en una petición conjunta para que nos portemos mejor en el congreso de los diputados, para este viaje no hacían falta estas alforjas", aseveró. También en Canal Red, y en línea con las declaraciones de Aizpurua, aseguró que "está bien que (Sánchez) reconozca el problema, pero falta todas las medidas". 

La visión del PNV

Desde el Partido Nacionalista Vasco se han mostrado más cautos a la hora de hablar sobre este caso. Ya el jueves, con la incógnita de Sánchez más asentada, el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, pidió solucionar "cuanto antes" toda esta situación. Un discurso que han mantenido durante los últimos días y que el portavoz de la formación jeltzale en el Congreso, Aitor Esteban, también defendió una vez conocida la permanencia del líder socialista. 

Durante una entrevista para Radio Euskadi realizada el lunes por la noche, el diputado del PNV reclamó una propuesta "concreta" para poder abordar esa "regeneración democrática". "No ha propuesto absolutamente nada, pero esto tiene que concretarse y hay temas muy delicados", insistió.

En esta línea, respecto a las críticas lanzadas contra los medios de comunicación y al hecho de que "siempre ha habido desinformación", Esteban defendió que "hay asuntos en democracia que deben ser preservados" como la libertad de expresión o de prensa. "¿Cómo se mide esto?, ¿quién es el que dice este sí y este no?" Me parece complicado" señaló.

Por su parte, el Ejecutivo vasco también se sumó este martes al debate originado tras la carta de Sánchez. En la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno, el portavoz en funciones, Bingen Zupiria, destacó el "amplio consenso" que existe en las instituciones, el ámbito social y el político para que se adopten medidas que favorezcan "un mejor funcionamiento de la democracia".

Zupiria llamó al Gobierno central a "cumplir" los compromisos pendientes y recordó otros casos similares en Euskadi que "no deberían de haber ocurrido". Entre ellos, el "más grave" y en alusión a la banda terrorista ETA que ejerció una "violencia ilegítima", con la ambición de "deslegitimar el sistema democrático e institucional".

Asimismo hizo referencia a otros sucesos como la negativa de la Mesa del Parlamento vasco a disolver el grupo Sozialista Abertzaleak, cosa que ordenó el Tribunal Supremo; los señalamientos que han sufrido varios políticos; o el cierre de los periódicos, Egin y Egunkaria.