Osakidetza vuelve a ser noticia este verano. Si bien la situación del Sistema de Salud Vasco fue uno de los asuntos más recurrentes la pasada legislatura, parece que esta próxima también lo será, tanto porque es uno de los desafíos a los que se enfrenta el nuevo Gobierno vasco como porque, en las últimas semanas, ya son varias las quejas de los sindicatos.
A las ya habituales quejas de todos los veranos por los recortes en los centros de salud, se suman dos casos recientes: uno tiene que ver con los pases de visita hospitalaria de los fines de semana y festivos y el otro está relacionado con las ambulancias.
Respecto a los pases de visita hospitalarios, el Sindicato Médico de Euskadi (SME) reclama mejoras en las retribuciones salariales de los profesionales durante estas jornadas que están consideradas horas extra. A través de una carta, trasladan su negativa a realizar este tipo de pase por estar en desacuerdo con las cuantías percibidas y exigen la aplicación del incremento anual en virtud del IPC.
Por otro lado, llegan protestas desde el sector de las ambulancias. Todos los sindicatos —ELA, LAB, SME, SATSE, ESK, CCOO y UGT— denuncian que, el pasado mes de julio, un total de 88 turnos de los centros coordinadores y en ambulancias medicalizadas de Emergentziak Osakidetza no han estado dotados de personal médico. Un servicio "esencial, que salva vidas fuera de los hospitales" y que, "por la nefasta gestión ha dejado desprotegida" a la población en más de 100 emergencias por no dotar con médicos las ambulancias medicalizadas y dejar bajo mínimos el personal de los centros coordinadores del 112-Osakidetza.
Piden el cese del actual equipo de gestión
En el punto de mira está el nuevo consejero de Salud, Alberto Martínez, que no ha cumplido ni dos meses en el cargo, y al que los sindicatos piden que cese al actual equipo de gestión "para que este servicio que es esencial para la población, pueda dar una asistencia de calidad y seguir salvando vidas".
De esta forma, antes de que comience la actividad política, ya hay abiertos varios frentes en Osakidetza. Y también, todo esto ocurre a escasas semanas de que se ponga en marcha la mesa de trabajo con el fin de lograr el gran pacto de Salud en Euskadi en un plazo de seis meses. Una reunión que tendrá lugar el 5 de septiembre y en la que se presentará un calendario, una metodología y unos primeros documentos.
En este sentido, desde el Gobierno vasco confían en el que los plazos se cumplan y afrontan este proceso con disposición "para escuchar y pactar". "Los agentes políticos, sindicales y sanitarios son imprescindibles, por lo que se prevé integrarlas en el amplio acuerdo que se espera lograr. Así lo contemplamos y espero que todos participen en el pacto", señalaba recientemente en una entrevista a Euskadi Irratia la vicelehendakari primera, Ibone Bengoetxea.
La segunda mayor preocupación para los vascos
El reto por mejorar Osakidetza viene de lejos. Durante la pasada legislatura se habló mucho de ello y la anterior consejera de Salud, Gotzone Sagardui, recibió grandes críticas por su gestión. Y es que, desde hace ya unos años, los ciudadanos vienen lamentando el declive del Sistema de Salud Vasco hasta el punto de consolidarse como la segunda mayor preocupación para los vascos, solo superada por los problemas ligados al mercado de trabajo.
Por delante, quedan meses de mucho trabajo para el nuevo Gobierno vasco que marca, entre otros objetivos, reducir las listas de espera o cubrir el déficit de profesionales.