Bildu redobla su estrategia 'pactista' con su oferta a Pradales para los presupuestos
- Ofrecen "estabilidad transformadora" y aseguran que su propuesta presupuestaria global "ha venido para quedarse"
- Más información: Bildu ofrece a Pradales un acuerdo presupuestario que englobe al Gobierno vasco y las diputaciones
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El proyecto de las cuentas vascas para 2025 ya está sobre la mesa. Ya se conocen las primeras líneas generales del presupuesto con el que contará Euskadi para el próximo año, un total de 15.728 millones de euros que se destinarán a ámbitos como salud, vivienda o educación.
Aunque el Gobierno vasco —compuesto por PNV y PSE-EE— cuenta con la mayoría suficiente para aprobar las cuentas, quiere contar con la visión del resto de formaciones políticas —a excepción de Vox— porque defienden que "cuanto más participativos sean los presupuestos, mejor".
Ya hace unas semanas, EH Bildu planteó un acuerdo presupuestario que englobe al Gobierno vasco y a las tres diputaciones de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa. Un planteamiento que no termina de convencer al lehendakari, Imanol Pradales, quien aseguró que no sabía si esta propuesta respondía a la "táctica política" y que, además, mostraba "poco respeto por la estructura institucional".
"Estabilidad transformadora"
En este contexto, Bildu se presenta como un partido con el que poder alcanzar pactos y ofrece al Gobierno de Pradales una "estabilidad transformadora" para aprobar los presupuestos vascos del próximo año.
La principal fuerza aboga por una "visión común" que redunde en la "armonización" de las políticas públicas. "Hay que reforzar nuestra visión de país y conectar nuestras capacidades y conocimientos institucionales, superando dinámicas fragmentadoras o dinámicas parciales", señala el portavoz de Bildu, Pello Otxandiano.
"Nadie hoy pone en cuestión que el acceso a la vivienda es un derecho subjetivo que hay que implementar y que si no hay una intervención por parte del sector público, por parte de la política, la situación va a ir a peor, o que Osakidetza está en un proceso de declive y que el sector público debe intervenir", asegura.
El portavoz subrayaba que "hay que aprovechar" el tiempo antes de que las instituciones vascas presenten sus proyectos presupuestarios y "dialogar y negociar en torno a las prioridades que tienen que recoger esos presupuestos".
En este sentido, Otxandiano recordaba que, así como en Bizkaia el PNV y el PSE-EE cuentan con la mayoría necesaria, no es el caso de Álava y Gipuzkoa. Por eso, Bildu se postula como ese tercer socio que necesitan jeltzales y socialistas en estas dos provincias. "El sentido común nos empuja a entablar un espacio de diálogo entre las fuerzas políticas que somos capaces de conformar mayorías".
La propuesta "ha venido para quedarse"
Respecto a la propuesta presupuestaria global de la formación abertzale, su coordinador general, Arnaldo Otegi, sostiene que "no es para dos días, ni para estos presupuestos, sino que ha venido para quedarse", pese a la negativa del Gobierno vasco.
Para Otegi, este planteamiento, "no ataca a la foralidad" y supone "una apuesta decidida por la eficacia en la administración pública". "Apostamos por poner todos los recursos encima de la mesa y llegar a un gran acuerdo entre el PSOE, el PNV y nosotros sobre dónde hay que dirigir la inversión pública".
Así, desde la formación abertzale insisten en que van a mantener su propuesta. "Ha venido para quedarse y es buena para el país. Yo creo que algún día seremos capaces de entender que es mejor diseñar políticas de inversión pública de manera coherente, con grandes acuerdos, que hacerlo de manera partidista y decir 'aquí tengo mayoría, pongo el presupuesto que yo quiero, aquí no tengo y voy a tratar de negociar parcialmente'".