Imanol Pradales e Iñigo Urkullu se abrazan en el Parlamento vasco tras la elección del primero como lehendakari
Del año en que Pradales sustituyó a Urkullu en Ajuria Enea a un 2025 de grandes pactos
- Tras 12 años como lehendakari, el PNV decidió prescindir de Urkullu y optar por un cambio generacional
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Allá por finales de noviembre de 2023, el PNV comunicó a Iñigo Urkullu que no contaría con él para liderar el partido en las elecciones autonómicas de 2024. Se cerraba así una etapa de 12 años consecutivos como lehendakari, avalado por la evolución económica y con algún que otro frente abierto como el de Osakidetza.
Esta fue una decisión que no dejó indiferente a nadie. Algunos, incluso, estaban convencidos de que no contar con Urkullu como candidato a lehendakari, pasaría factura al PNV en las autonómicas.
Comenzaba entonces la ardua tarea de encontrar un sustituto idóneo en todos los aspectos, más aún teniendo en cuenta que los jeltzales no atravesaban su mejor momento tras el varapalo en las elecciones generales del 23 de julio de 2023, cuando quedaron como segunda fuerza más votada en Euskadi —por detrás del PSOE— y empataron a cinco diputados con EH Bildu.
El exlehendakari, Iñigo Urkullu, durante el pleno de control en el Parlamento vasco / LEGEBILTZARRA
Cambio generacional
Pronto se anunció quién relevaría a Urkullu. Como se esperaba, el PNV apostó por un cambio generacional con la elección de Imanol Pradales, que desde 2015 hasta entonces ocupaba el cargo de diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial en la Diputación de Bizkaia.
El PNV optó por un perfil casi desconocido que, por una parte, podía ser positivo, pero por otra, también podía entrañar dificultades al partido. "Es hora de abrir el camino a una nueva generación que sea capaz de pilotar las instituciones vascas e impulsar nuestro autogobierno en la próxima década", aseguraban entonces los nacionalistas vascos tras la elección de Pradales.
En su discurso de investidura, Pradales dedicó una palabras a su antecesor, a quien agradeció su labor durante las tres legislaturas al frente del Gobierno vasco y del que destacó su "capacidad de liderazgo, tesón y compromiso".
Seis meses como lehendakari
Imanol Pradales cumplió recientemente seis meses como lehendakari. Medio año marcado por la búsqueda de un Pacto por Osakidetza, las negociaciones con el Gobierno central, el diálogo con sindicatos y empresarios o el acuerdo de la reforma fiscal.
Una de las características que comparten los Gobiernos de Urkullu y Pradales es que todos ellos —las tres legislaturas de Urkullu y el actual de Pradales— tienen como socio al PSE-EE.
Y este, el Gobierno de coalición, es uno de los aspectos que el actual lehendakari pone en valor. Pradales reivindica la capacidad de jeltzales y socialistas de "acordar a izquierda y derecha con el fin de mejorar las políticas públicas".
En este sentido, para el lehendakari esto demuestra que los gobiernos de coalición entre ambos partidos son "el punto de anclaje de la geometría variable en el ámbito institucional de Euskadi".
Primeros presupuestos
El lehendakari ha despedido el año con sus primeros presupuestos aprobados. PNV y PSE-EE sacaron adelante las cuentas vascas de 2025 sin la necesidad del apoyo de otras formaciones políticas.
Las negociaciones fueron intensas a este respecto, sobre todo con Bildu, con quienes mantuvieron conversaciones hasta prácticamente concluir el plazo.
Pero finalmente, no fue posible un acuerdo y los socios de Gobierno aprobaron en solitario los Presupuestos.
Imanol Pradales, Noël d'Anjou y Eneko Andueza tras la aprobación de los Presupuestos de 2025 en el Parlamento vasco / L. RICO - EFE
2025, un año clave
Ahora, la vista está puesta en el nuevo año, un 2025 con muchos objetivos de por medio. Uno de los primordiales, el cumplimiento íntegro del Estatuto vasco y la transferencia total a Euskadi de las competencias pendientes.
Otro de los grandes retos de Pradales es conformar el conocido como Pacto por Osakidetza. El declive del Servicio Vasco de Salud se arrastra de la anterior legislatura y el lehendakari busca un consenso entre agentes políticos y sociales para mejorar esta situación.
Además, mejorar el acceso a la vivienda —sobre todo para los jóvenes—, mantener el arraigo de las empresas vascas, calmar las aguas con algunos sindicatos o abrir el debate sobre un nuevo Pacto Estatutario son algunos de los propósitos de Imanol Pradales para el nuevo año.