El Registro de Actividades Turísticas de Euskadi contabiliza hasta 4.860 viviendas turísticas

El Registro de Empresas y Actividades Turísticas de Euskadi (REATE) contabiliza ya 4.860 Viviendas de Uso Turístico (VUT), si bien el ritmo de implantación de este tipo de alojamientos difiere en gran medida en los tres territorios vascos. Mientras que en Álava hay 214 viviendas de este tipo, en Bizkaia ascienden hasta las 2.666, pero si tenemos en cuenta su extensión, es Gipuzkoa la que más VUT tiene, con 1.243 registradas.

Lógicamente, las tres capitales vascas concentran un mayor número de viviendas turísticas, con Donostia-San Sebastián a la cabeza con 1.243, a pesar de no conceder nuevas licencias desde marzo de 2023. Le sigue Bilbao con 1.072 VUT, pero que a pesar de estar por debajo de los ratios, el pasado mes de octubre estableció una moratoria. Y muy lejos de ambas se encuentra Vitoria-Gasteiz, con sólo 95 alojamientos de este tipo, pero que se plantea ya realizar una modificación de su Plan Generación de Ordenación Urbana (PGOU) para regular este fenómeno.

Además, son 764 las Habitaciones de Uso Turístico (HUT) registradas en dicho censo. 513 en Bizkaia, 290 de las cuales se alquilan en Bilbao; 203 en Gipuzkoa, 114 de las mismas en Donostia-San Sebastián; y 48 en Álava, de las que 14 están localizadas en Vitoria-Gasteiz.

Las playas de Donostia-San Sebastián son uno de los lugares más visitados por los turistas. Turismo Euskadi

Equiparación de HUT y VUT

Siguiendo la senda del Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián, que en 2023 aplicaba una moratoria prorrogable hasta abril de 2026, en octubre del año pasado el Ayuntamiento de Bilbao anunciaba la suspensión cautelar de la concesión de licencias durante un año para poder hacer unos ajustes en la normativa municipal referente a este tipo de alojamientos.

Precisamente ayer, el Ayuntamiento de Bilbao aprobaba, de forma inicial, una modificación del Plan General de Ordenación de Ordenación Urbana que afecta a las viviendas de uso turístico y también a las habitaciones de uso turístico con el objetivo de "garantizar un desarrollo equilibrado de la ciudad" y "promover el uso residencial en viviendas para domicilio habitual".

Este cambio normativo, que prevé aprobarse de forma definitiva antes de que finalice la moratoria a la concesión de licencias que finaliza el próximo mes de octubre, se establecerá aún más restricciones a la implantación de este tipo de alojamientos en la capital vizcaína.

Un grupo de turistas en Bilbao. EFE

Hasta ahora, para poder operar una VUT en la villa, ésta debía situarse en la primera planta o en la planta baja si tenía cédula de habitabilidad. Además, en Casco Viejo y Bilbao La Vieja, calificadas como zonas de alta concentración, no estaba permitida más de una vivienda de uso turístico por edificio.

Las zonas de alta concentración se extienden

Con la modificación presentada ahora, los requisitos serán aún más exigentes para todas. En primer lugar, las zonas de alta concentración se extienden más allá de Casco Viejo y Bilbao La Vieja e incluirán también Matiko (Uribarri), Abando, Indautxu y Olabeaga.

En segundo lugar, las Habitaciones de Uso Turístico (HUT) se equipararán, a efectos legales, a las Viviendas de Uso Turístico (VUT), y pasarán a ser consideradas también actividad económica, con las mismas limitaciones de implantación. De esta forma, el Consistorio trata de evitar que los propietarios de un piso recurran a la figura de las HUT para esquivar esos requisitos.

Cartel de una vivienda de uso turístico. EFE

Más limitaciones para las nuevas licencias

De ser aprobada esta modificación del PGOU, en las áreas de alta concentración, en los edificios residenciales sólo se permitirán VUT y HUT en planta baja o primera, con acceso independiente, recorrido accesible y que no condicione posibles necesidades de la comunidad, como la instalación de ascensores. Además se limitará a un alojamiento turístico por edificio.

Y en el resto de la ciudad, también se autorizarán VUT y HUT en la planta más baja de los bloques destinada a viviendas y podrán existir tantos como el número de viviendas que haya en esa planta. Y, aunque no será necesario contar con un acceso independiente, éste deberá reunir las condiciones necesarias de accesibilidad.

Comienza ahora un periodo de un mes de exposición pública, en la que la ciudadanía puede presentar alegaciones, antes de que el Ayuntamiento envíe copia del documento a la Comisión de Ordenación del Territorio del País Vasco para su correspondiente informe.