Alberto Martínez y el cambio de clima en torno a Osakidetza
El "buen pie", según las asociaciones de pacientes, con el que comienzan los contactos políticos y sindicales para alumbrar un gran pacto social por la sanidad pública en Euskadi es una buena noticia. Tras los sinsabores acumulados en torno a Osakidetza en los últimos años, la sensación que transmiten los agentes implicados, incluido el principal partido de la oposición como es EH Bildu, es que podemos estar ante un punto de inflexión en la gestión de la sanidad vasca.
El sistema público de salud de Euskadi, una de las joyas de la corona del autogobierno, lleva años en entredicho por sus carencias en el servicio y su pérdida reputacional y es una de las máximas prioridades del lehendakari Imanol Pradales. El consejero del ramo, Alberto Martínez, que ya se ha estrenado con algún susto este verano, debe ahora hilar fino a la hora de avanzar en la letra pequeña de ese Pacto por la Salud que, de momento, ha generado expectativas a todos los niveles.