Este viernes amanecía en Euskadi con la triste noticia del fallecimiento de Agustín Ibarrola, el pintor y escultor vasco, a la edad de 93 años. Su partida deja un vacío significativo en el mundo del arte, donde destacó por sus obras vanguardistas que capturaban la esencia de su amor por la naturaleza, la memoria y la libertad.
Agustín Ibarrola no solo fue una figura destacada en el ámbito artístico, sino también una voz valiente que se alzó contra la violencia y el terrorismo de ETA. Su compromiso con la expresión artística innovadora y su claridad en la condena de la violencia política lo convirtieron en un referente tanto en el País Vasco como más allá de sus fronteras.
A lo largo de su destacada carrera, el artista vasco fue objeto de múltiples reconocimientos. En 1993, fue condecorado con la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes, compartiendo este honor con los miembros del Equipo 57. En el año 2001, recibió el prestigioso Premio de la Confederación "Mayores en Acción" y el galardón Jovellanos. Además, en 2005, se le otorgó la distinción máxima al ser galardonado con la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid. Estos reconocimientos son testimonio de la magnitud de su contribución al mundo artístico y cultural, consolidando su posición como una figura destacada en el panorama de las bellas artes.
Las obras más sorprendentes: arte y naturaleza
1. La Colina de Carbón Prosper Haniel en Ruhr, Alemania, se convirtió en un lienzo para la expresión artística del pintor vasco, quien prefirió abordar desafíos en grandes formatos. Pintó en árboles y rocas, buscando una conexión profunda con la vida y las personas.
2. Los Cubos de la Memoria en Asturias son una manifestación de arte público creada por él en los bloques de hormigón que forman la escollera del puerto marinero de Llanes. Esta obra fusiona elementos esenciales del artista con el rico pasado histórico y cultural de Llanes, revelando así la memoria del artista, del arte y del territorio.
3. El Bosque de Oma en Kortezubi, inaugurado por el pintor en 1984, es un patrimonio cultural que explora la relación entre la naturaleza, el arte y los seres humanos. Esta experiencia artística original reflexiona sobre el espacio y las reglas del arte, inmersa en la magia siempre presente en el bosque.
4. La Mirada en Vitoria-Gasteiz es una escultura más significativa de Ibarrola, creada en mármol de Lastur en 1992 y situada en la Plaza del General Loma. Desde este punto, se contempla la Plaza de la Virgen Blanca, mostrando una fusión única entre el arte y el entorno urbano.
5. Homenaje a las Víctimas del Terrorismo es otra obra representativa del pintor y escultor vasco, creada en 2002 y ubicada en el Portal de Foronda. Con esta escultura, Ibarrola rinde homenaje a las víctimas del terrorismo, expresando su firme posición contra la violencia de ETA.
6. "Guernica Gernikara" es uno de los murales más emblemáticos del artista, un homenaje a Pablo Picasso que fusiona la imagen del Guernica con las características figurativas propias del pintor vasco. Esta obra permite reconocer diversas manifestaciones ideológicas.
7. Las Piedras de Garoza, un proyecto de arte y naturaleza en la Dehesa de Garoza de Muñogalindo (Ávila), consiste en un conjunto de 115 piedras de gran tamaño. Cada piedra, según explicó el autor, representa su arte vanguardista, aprovechando las formas naturales con un enfoque geométrico.
8. Los Grabados, obras en las que Ibarrola utilizaba el papel como soporte, se destacan por su compromiso social. Fueron creados para apoyar a obreros en huelga, estudiantes y otros movimientos progresistas. Estos grabados se vendían para que la gente los tuviera en sus hogares como expresión de una cultura progresista, equiparándose estéticamente a sus obras mayores realizadas en óleos y otros materiales.