Luis del Olmo, de Bycam y Grupo Moyua, charla en un receso con Musa Daffeh, trabajador de la construcción tras pasar por el programa GazteOn de la Diputación de Bizkaia / Araba Press
Bizkaia hace cantera ante la falta de trabajadores en la construcción: “Tienen ganas de aprender”
Crónica Vasca recoge el testimonio de empresas y personas vulnerables contratadas tras participar por los programas de la diputación enfocados al sector, el más castigado por la escasez de mano de obra
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Musa Daffeh nació en Gambia. A sus 19 años apura su etapa como juvenil en el Sestao River y mira de frente a la opción de dar el salto al primer equipo de uno de los clubes con más solera de Euskadi. “Hay que hacer una prueba”, dice en un castellano limitado, pero suficiente.
En el fútbol la competencia es enorme. En la construcción, en cambio, apenas existe. Las empresas no encuentran trabajadores, menos aún jóvenes.
“Estos programas ayudan. Son una forma de acceder a mano de obra formada y con ganas de aprender”, destaca Luis del Olmo, responsable de Personas de Bycam, del Grupo Moyua, la constructora que ha fichado a Musa tras su paso por GazteOn, la ruta formativa del Departamento de Empleo, Cohesión Social e Igualdad de la Diputación de Bizkaia.
Musa Daffeh en su puesto de trabajo / Araba Press
Plan de empleo 2024-2029
Desde la institución foral corroboran esta realidad paradójica que vive el sector. Por un lado, es uno de los motores económicos del territorio y, al mismo tiempo, sufre una falta extrema de mano de obra cualificada.
Según la última encuesta de Confebask, el 100% de las empresas de construcción necesita personal, una carencia que limita el crecimiento y la inversión en el sector.
Para responder a estas necesidades, el Departamento de Empleo, Cohesión Social e Igualdad ha diseñado una respuesta “clara, coordinada y anticipatoria”, alineada con los objetivos del Plan Territorial de Empleo 2024-2029.
Tenemos sectores estratégicos que necesitan personas y, al mismo tiempo, personas que necesitan una oportunidad real
“Este plan sitúa el empleo como un derecho, como una herramienta de inclusión y como motor de competitividad económica, y señala la importancia de fortalecer sectores productivos estratégicos para el territorio. El de la construcción es, sin duda, uno de ellos”.
La diputada foral de Empleo, Cohesión Social e Igualdad, Teresa Laespada, subraya que el objetivo último de estos programas va más allá de cubrir vacantes concretas.
“Cuando hablamos de empleo hablamos de cohesión social. Nuestro reto es que personas que parten de situaciones de mayor vulnerabilidad puedan incorporarse plenamente al mercado laboral, con derechos, con estabilidad y con un proyecto de vida propio. Y eso solo es posible si trabajamos de la mano con los sectores económicos y con las empresas”, explica.
La diputada foral vizcaína de Empleo, Cohesión Social e Igualdad, Teresa Laespada
"Aprende rápido"
El de Musa es un caso de éxito. Participó, a través de GazteOn, en una formación de dos meses y pronto encontró la puerta abierta de Bycam, donde realiza labores de albañilería y colocación de elementos en viviendas, como fachada ventilada.
“Desde que firmé el contrato el primer día estoy contento”, cuenta a este medio durante un descanso para comer en la vivienda en construcción en Llodio en la que trabaja en estos momentos. Superó el compromiso inicial de contratación de seis meses y acumula ya ocho en la empresa.
“Con ganas de seguir aprendiendo de maestros como José”, dice en presencia de su jefe de obra, un veterano albañil que aprueba la rápida integración de Musa. “Aprende rápido”, señala este.
Para Laespada, estos itinerarios permiten afrontar varios retos al mismo tiempo. “Tenemos sectores estratégicos que necesitan personas y, al mismo tiempo, personas que necesitan una oportunidad real. Programas como GazteOn o Laborlan nos permiten unir esas dos realidades, generar cantera y acompañar transiciones laborales que, de otro modo, serían mucho más difíciles”, afirma.
Estos programas nos permiten acceder a mano de obra con formación y con ganas de aprender
Los programas forales como GazteOn, Laborlan o Formación por Arraigo suponen una oportunidad para personas con dificultades de acceso al empleo, pero también un salvavidas para las empresas.
A través de Ascobi, compañías como Bycam o Fhimasa logran incorporar perfiles con la preparación suficiente para trabajar desde el primer día y una base que permite adquirir nuevas habilidades y crear cantera propia.
En este sentido, la diputada foral pone el acento en la corresponsabilidad del tejido empresarial. “Las empresas que participan en estos programas entienden que formar, acompañar y dar una oportunidad no es solo una responsabilidad social, sino también una inversión en su propio futuro. Sin ese compromiso empresarial, estas políticas no funcionarían”, subraya.
Luis del Olmo y Musa Daffeh, de Bycam, Grupo Moyua / Araba Press
Otros programas
En el caso de Laborlan, desarrollado junto con la Agencia Foral de Empleo y Emprendimiento DEMA, se ha formado en distintas ediciones a más de 550 personas, de las cuales más de 280 han encontrado empleo. Esto supone una tasa de inserción superior al 50%, aunque en los itinerarios de construcción (centrados sobre todo en el perfil de peón especialista en rehabilitación sostenible) los porcentajes son sensiblemente más altos.
“En Fhimasa llevamos varios años colaborando con Laborlan y creemos que es una iniciativa útil y muy positiva. Nos ha permitido acercarnos a personas desempleadas o en búsqueda de mejora profesional que quieren una oportunidad real de desarrollo”, señala Paula Heppe, directora de Recursos Humanos de la compañía.
Laborlan es una iniciativa muy útil. Encontrar talento cada vez es más difícil y es una vía de conectar personas y empresas
“Encontrar talento es cada vez más difícil y esta es una buena vía para conectar personas y empresas”, añaden desde la constructora bilbaína.
En el programa Arraigo por Formación, dirigido a personas migrantes, nueve de las doce personas participantes ya tienen un contrato acordado con empresas del sector.
La inserción efectiva se materializará cuando se resuelvan los permisos administrativos de residencia y trabajo, explican desde la Diputación.
Desarrollo económico y social
Mientras tanto, Musa sigue cada mañana subiendo a la obra con casco y botas. El fútbol continúa como horizonte, pero la construcción ya es una realidad. “Quiero aprender todo lo que pueda”, dice.
Para Teresa Laespada, ahí reside el sentido último de estas políticas públicas: “Queremos un mercado de trabajo que no deje a nadie atrás y que, al mismo tiempo, sea capaz de sostener el desarrollo económico de Bizkaia. Cuando una persona como Musa encuentra una oportunidad y una empresa encuentra el perfil que necesita, estamos haciendo bien las cosas como sociedad”.
En un sector que busca relevo generacional, Bizkaia intenta que esas ganas no se pierdan.