Las empresas tecnológicas necesitan y no encuentran 1.500 trabajadores al año

La falta de personal cualificado preocupa en muchos sectores. En el caso de las empresas tecnológicas el problema va más allá y es ya un freno para el desarrollo de proyectos y el crecimiento. El clúster GAIA ha puesto cifras a ese gap en Euskadi, que está cerca de 1.500 profesionales al año. En 2021 las empresas incorporaron 1.300 trabajadores y este año se contratará a otros tantos, pero para cubrir completamente sus necesidades las empresas necesitarían el doble anual, ha explicado Elena Zarraga, presidenta del clúster.

Las 300 firmas asociadas en GAIA , agrupación que conecta familias como las TIC, ingeniería o electrónica, alcanzaron una facturación el año pasado de 5.700 millones de euros, un 7% más, con un incremento en el número de profesionales de unos 1.300, el 6,3% más, ha explicado el clúster en la comparecencia previa a la asamblea general que se celebrará este miércoles en Vitoria. Las empresas del sector dan trabajo así a algo más de 22.000 personas en Euskadi, una cifra que no para de crecer pero que podría hacerlo a un ritmo mucho más vivo si hubiese cantera.

La falta de personal formado en ramas como la informática, la ciberseguridad o ingenierías está ya limitando el crecimiento del sector, ha evidenciado Zarraga, que ha indicado que se espera que las empresas puedan contratar a otras 1.300 personas en 2022, "y perfectamente se podría incorporar al doble si los hubiera", ha afirmado. En ese sentido, la presidenta del clúster y su director general, Tomás Iriondo, han hecho un llamamiento a administración, universidad y medios de comunicación a convertir en más atractivo un sector que echa en falta sobre todo la incorporación de mujeres. El propio Iriondo ha cuantificado esa falta de profesionales en Euskadi en una horquilla "de entre 1.000 y 1.500 trabajadores" al año.

Problemas con el suministro

El sector en conjunto acumula otro ejercicio de crecimiento, el séptimo consecutivo, aunque las distintas familias de GAIA cierran 2021 con cifras desiguales. Si el crecimiento medio de la facturación fue del 7%, lideran este avance las TIC (tecnología de la información y comunicaciones), consultoría e ingeniería repuntan mientras en el caso de la electrónica hay datos dispares en función de la afección por la falta de componentes y semiconductores.

El año 2022 se presenta con nuevas dificultades para las empresas sobre todo asociadas al incremento de costes de las materias primas o el impacto de la inflación en los costes laborales. Sobre esta cuestión además las firmas vascas deben redoblar esfuerzos para retener talento y eso pasa en muchos casos por el capítulo salarial, toda vez que hay que hacer frente además a la competencia de gigantes mundiales con más podería económico. En definitiva GAIA ha presentado un balance global positivo pero las dificultades están ahí. Sus empresas están llamadas a jugar un papel clave en la digitalización de la mano de las ayudas europeas y eso endulza el horizonte. "Pese a las incertidumbres que nos rodean nos sentimos fuertes y comprometidos con el reto que el desarrollo económico nos exige", ha dicho Iriondo.