Iberdrola arranca un curso vital para relanzar los grandes proyectos renovables en Euskadi

Iberdrola arranca un curso vital para relanzar los proyectos de renovables en el País Vasco. Ignacio Galán se reunido este lunes en Bilbao con el pleno del equipo directivo de la compañía en su tradicional primer encuentro tras el verano, en el que ha reafirmado la apuesta de la energética vasca por la autosuficiencia como clave en la eficiencia y transición hacia una economía verde. Y las renovables van a ver ser un pilar fundamental. La compañía cuenta, en colaboración con el EVE, con la iniciativa Aixeindar, que tramita parques eólicos con una capacidad de 250 MW en Álava. En este mismo territorio, también tiene el proyecto Ekienea, una planta fotovoltaica de 100 MW con una inversión de 70 millones de euros. Ambos proyectos arrancarán de manera inminente y en el caso de Aixeindar podría estar en funcionamiento en 2023. En el caso del futuro huerto Ekienea, el mayor parque solar vasco, podría arrancar la construcción también el próximo año.

En Euskadi no se instala un nuevo parque de generación eólica desde 2006 debido a la importante presión social que ha ido surgiendo en contra de los distintos emplazamientos. En estos momentos, el País Vasco cuenta con parques de generación eólica con un capacidad de 153 megavatios que pueden producir aproximadamente el 9% de la electricidad que se consume en la comunidad autónoma a lo largo de un año. Una cifras que el Gobierno vasco quiere mejorar, empujado por la crisis energética, y para ello ha reducido considerablemente los trámites para poner en marcha nuevos proyectos de energía renovable. Una medida aplaudido por Iberdrola que es uno de los actores principales en esa expansión. El objetivo del Ejecutivo vasco es generar en torno al 25% en 2030.

Parque de aerogeneradores. / Iberdrola

Dos proyectos vitales

Aquí entrarán en juego los dos proyectos inminentes de Iberdrola: Aixeindar y Ekienea. "Todo lo que sea apostar por los proyectos energéticos autóctonos es bienvenido en un momento de crisis energética como este", indicaban fuentes de la compañía de Ignacio Sánchez Galán, que tiene entre manos los proyectos más avanzados en el terreno eólico en Euskadi, en concreto en Labraza y Azaceta, en Álava. En ambos casos la sociedad conjunta con el Gobierno vasco, Aixeindar, mantiene su previsión de poder poner en marcha los aerogeneradores a lo largo del año que viene.

También en el territorio alavés, Iberdrola tiene el proyecto Ekienea, una planta fotovoltaica de 100 MW con una inversión de 70 millones de euros. La mayor planta fotovoltaica prevista en Euskadi "avanza bien" según apunta El Correo. y pretende desarrollarse en el polígono industrial de Arasur. La construcción podría arrancar en 2023. Detrás de este proyecto se encuentra la alianza de Iberdrola, Grupo Mondragon, la Diputación y el Ente de la Energía del Gobierno vasco -a través del EVE- en junio de 2020. El propósito es que las más de 250.000 paneles fotovoltaicos generen una energía limpia para 160.000 personas.

Encuentro entre el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán y el lehendakari, Iñigo Urkullu. / Iberdrola

Reunión de arranque de curso en Bilbao

Como es tradición, y coincidiendo con la Aste Nagusia bilbaína, Iberdrola vuelve a su trabajo ordinario tras unos días de vacaciones. La compañía destaca su compromiso histórico con Euskadi que se manifiesta en empleos, fiscalidad e impulso económico a través de la innovación tecnológica. Según ha detallado la compañía, esta sigue actuando como motor de la economía de Euskadi, con unas inversiones que, en el último año, se han elevado a 200 millones de euros.

El presidente, Ignacio Galán, ha subrayado el compromiso de la compañía de seguir ejerciendo un efecto tractor de la empleabilidad e industria vasca: a lo largo del ejercicio 2021, tal y como ponen de manifiesto, entre otras cifras, los más de 1.800 millones de euros de impacto económico generados por la actividad de Iberdrola en la comunidad autónoma. En este sentido, han destacado que, sólo durante el pasado año, Iberdrola realizó compras y contrataciones de servicios a más de 500 proveedores vascos por un valor aproximado de 1.000 millones de euros.