Después de una semana de batalla sindical previa a los comicios en Mercedes Benz Vitoria, ya hay una decisión en firme sobre el voto telemático en las elecciones sindicales. El Departamento de Trabajo del Gobierno vasco ha dictado una resolución que desestima el conflicto laboral abierto por el sindicato ELA para que no se usase este sistema de votación en los comicios de la factoría más grande de Euskadi. La central nacionalista, que preside el comité de empresa pero no tiene una mayoría de socios afines, presentó el pasado viernes una reclamación ante la mesa electoral de esos comicios para protestar contra un voto que tanto ELA como LAB y ESK considera inseguro y que ya generó, en su opinión, presuntas irregularidades durante el referéndum sobre el convenio laboral de la firma.
La mesa desestimó esas propuestas y eso ha derivado en un laudo de reclamación contra ese sistema de voto que ahora el arbitraje del Departamento de Trabajo y Empleo ha rechazado. Pese a que el arbitraje del Ejecutivo autonómico reconoce que hay mejoras pendientes de hacer en ese sistema sobre el que no había regulación hasta ahora, la demanda interpuesta por ELA ha sido desestimada íntegramente. El documento, al que ha tenido acceso 'Crónica Vasca' aboca así a que se celebren elecciones con tres modalidades de voto en Mercedes Vitoria: voto presencial, voto por correo y voto telemático, dejando abierta a la mesa electoral de los comicios de Mercedes que investigue posibles irregularidades si se detectan procedimientos que puedan implicar un fraude del voto. Las alternativas a distancia deberán ser solicitadas antes del día 14 de este mes.
El desacuerdo entre sindicatos ha vuelto a poner de relieve los dos bloques sindicales presentes en la factoría más grande de Euskadi, enfrentados desde las movilizaciones por el convenio cuyo acuerdo permitió salvar la inversión de 1.200 millones para la nueva plataforma VAN.EA, que será la que permita a la fábrica dar el salto de fabricar la furgoneta eléctrica del futuro, con apoyo de 170 millones de los fondos europeos. El pasado miércoles los sindicatos nacionalista advirtieron de las inseguridades que les generaba ese sistema de voto y la sospecha de que ese sistema beneficia y benefició a la mayoría sindical que aprobó el acuerdo con la dirección de Emilio Titos y que hay un interés de parte en que ahora se vuelva a introducir ese sistema. Las centrales aseguran no entender "que Mercedes esté dispuesta a pagar unos 14.000 euros" por este sistema de sufragio cuando el voto presencial "supera el 92% de participación".
A esas acusaciones respondió el propio secretario general de UGT, Pepe Álvarez, este jueves durante una visita a Vitoria-Gasteiz en la que se reunió precisamente con los delegados de su sindicato en Mercedes Vitoria. Álvarez acusó a las organizaciones nacionalistas de querer "una abstención más alta" en las elecciones y aseguró que son ellas quienes están manipulando estos comicios. Unas elecciones en las que, en su opinión, ELA, LAB y ESK buscan "poner puertas al campo" cercenando las posibilidades de emitir un sufragio. El secretario general de UGT ha afirmado que votar "es lo más democrático" y que "todos" los trabajadores de Mercedes deben poder ejercer su derecho de forma libre y sin coacciones. A su entender, la negativa de los sindicatos nacionalistas al voto telemático responde al "miedo" de que el bloque nacionalista, al igual que en el referéndum, vuelva a salir derrotado.