El sindicato LAB apuesta por aprovechar la hipotética investidura de Pedro Sánchez para mejorar el marco de relaciones laborales en Euskadi. Y, en concreto, para "blindar" la negociación colectiva en la comunidad. Además, desde el sindicato sugieren que van a seguir castigando al PNV en los próximos meses.
La central sindical ha apostado este martes por aprovechar la oportunidad que da el contexto político, en el que el independentismo va a ser "decisivo" en la formación de nuevo gobierno, para situar las reivindicaciones de los trabajadores en la agenda política. Algo que sirva para "dar pasos" en la construcción de un marco vasco de relaciones laborales y protección social, "poner límites a la estatalización y blindar el marco propio de negociación colectiva" y exigir la transferencia de Seguridad Social.
Su coordinadora, Garbiñe Aranburu, ha presentado en Bilbao los principales retos de LAB para este nuevo curso en un contexto para los trabajadores de pérdida de poder adquisitivo, aumento del precio de los alimentos, encarecimiento de las hipotecas o "debilitamiento" de los servicios públicos y en el que "la garantía" para hacerle frente es la movilización.
Tal y como recoge Europa Press, Aranburu ha asegurado que "este curso también" la "principal tarea" de LAB será "seguir alimentando esa vía", para lo que, a su entender, "existen condiciones" teniendo en cuenta, entre otros factores, que ha habido ya en años anteriores "una activación muy importante de esas luchas sindicales y sociales" con "un empoderamiento colectivo de la clase trabajadora" o la huelga feminista convocada para este otoño.
Asimismo, ha opinado que "el contexto político también da esas posibilidades para situar las reivindicaciones de la clase trabajadora en la agenda política" para impulsar "cambios políticos". Así, ha aludido a las negociaciones que se están llevando a cabo para formar nuevo gobierno tras las elecciones generales del pasado mes de julio y en las que "el independentismo va a ser decisivo".
"Hay que aprovechar esa fuerza para dar pasos en la construcción de un marco vasco de relaciones laborales y protección social, para poner límites a la estatalización de la negociación colectiva y para blindar el marco propio de negociación colectiva, así como para exigir la transferencia de la Seguridad Social, y en definitiva aprovechar para avanzar en el derecho que tenemos los trabajadores a decidir nuestras propias condiciones laborales y salariales sin ninguna injerencia del ámbito estatal, en nuestro propio territorio", ha planteado.
PNV y Bildu
También ha hecho referencia a la proximidad de las elecciones autonómicas en Euskadi, donde los comicios municipales y forales de mayo han dejado la "lección" de que los trabajadoras tienen "voz y voto" y, por tanto, "capacidad para castigar a quienes hacen políticas a favor de la patronal y reforzar a quienes sitúan las reivindicaciones de los trabajadores y las trabajadoras en la agenda política".
Esta última referencia de Aranburu iba sin nombres y apellidos, claro, pero parece obvio que se refería a castigar al PNV y fortalecer a EH Bildu. Algo más que relevante teniendo en cuenta que estos días desde Sabin Etxea y Ajuria Enea se ha atacado con fuerza a los sindicatos ELA y LAB por su supuesta alianza con la coalición abertzale.