La plantilla de CAF sopesa más protestas tras anunciar paros por el convenio

Este jueves las plantillas de CAF en Beasain e Irún iniciaban una ronda de paros ante el “inmovilismo” de la dirección en la negociación del convenio. Catalogan la tercera y última propuesta de la misma “insuficiente”, ya que no aborda puntos claves como la ampliación de la plantilla, medidas para la jubilación, la garantía del IPC o el aumento de subcontrataciones. 

“Hemos activado los paros porque hay mucho margen de negociación”, asegura Aitor Martínez, delegado de LAB en CAF. Y es que desde la parte sindical quieren “desatascar” un diálogo que lleva activo meses. Martínez desglosa uno a uno los puntos claves de su petición,  y hace especial hincapié en las condiciones del personal titulado. “De los casi 3.000 trabajadores de la planta de Beasain, alrededor de 1.000 son personal titulado que trabajan más que el resto, unas 1.631 horas”, detalla. 

La empresa, confiesa, “ni siquiera lo menciona en su propuesta”. Tampoco menciona nada del teletrabajo, ni de la incorporación a la negociación de los trabajadores de la planta de Castejón de Navarra, TRENASA. “Actualmente el convenio afecta a Beasain, Madrid e Irún, solicitamos que también recoja a Castejón. Así como una subida salarial vinculada al IPC”. 

Instalaciones de CAF/LAB

Propuesta "insuficiente"

Y es que según detalla, la propuesta de la dirección pasa por una subida del 4,9%, “cuando la subida del IPC en 2022 fue de 5,4%. Su propuesta es insuficiente, porque también abogamos por una ampliación de la plantilla, hace falta más mano de obra y estamos impulsando la contratación y lo que la dirección nos ofrece es aumentar la de taller en 165 puestos fijos, 140 en Beasain y 25 en Irún”. 

Insiste en que desde los sindicatos están abiertos a más movimientos si la empresa no “pone sobre la mesa lo que la plantilla quiere”. Las movilizaciones van in crescendo, insiste, y es que CAF “tiene la mayor cartera de pedidos de la historia. Que coyunturalmente tiene menos beneficios, puede ser; pero sus pedidos a medio-largo plazo están asegurados”. 

Bajo su punto de vista, los movimientos de la multinacional van dirigidos “a deslocalizar y subcontratar todo lo que se pueda, a abaratar costes”. Algo que desde la plantilla ven con preocupación porque “no podemos competir con esos nuevos mercados low cost, como México o la India, con mano de obra barata y malas condiciones”.