Bain eleva su peso en ITP a cerca del 80% al quedarse fuera Sapa

El larguísimo proceso de venta de ITP Aero puede darse por cerrado. Son tres años y medio desde que Rolls-Royce dio a conocer que quería vender la compañía de Zamudio y más de dos años desde que Bain Capital se aseguró el papel de nuevo socio principal. En ese tiempo han aparecido diversos actores secundarios interesados en formar parte del accionariado de la aeronáutica pero, definido ya el nuevo consejo de administración, finalmente Bain solo tendrá tres acompañantes: Indra, Gobierno vasco y JB Capital.

Lo más llamativo es que la guipuzcoana Sapa no ha terminado de materializar ese anuncio de compra del 5% del fabricante de motores de avión. La firma de los Aperribay se postuló como primer socio de perfil industrial de la compañía y de hecho diversas informaciones otorgaron en su día a la empresa de Andoain el papel de muñidora en las negociaciones para la entrada de Indra.

Pudo ser así, desde luego, y de hecho la familia Aperribay mantendrá una cierta cercanía con ITP Aero a través de Indra, en cuyo consejo ha apostado por colocar al propio Jokin, presidente de la Real Sociedad. Pero la guipuzcoana, dedicada al sector de defensa, no comprará finalmente de forma directa ese 5% de ITP como estaba previsto. Así lo ha confirmado a este medio la propia Sapa, que atribuye la decisión a razones de mercado, principalmente el mayor coste de las participaciones de la aeronáutica respecto al momento en que se anunció su entrada, lo que hace menos interesante la operación.

Hay que recordar que Bain compró ITP por 1.700 millones de euros, de forma que cada 'trocito' de la compañía tiene un valor de unos cuantos millones de euros. Indra anunció su 9,5% por unos 175 millones de euros mientras que Finkatuz, el fondo con el que el Gobierno vasco accede a su 6%, tiene destinados en principio cerca de 70 millones a esta participación, que en el caso de Lakua puede considerarse 'barata'. 

Eva Azoulay, nueva CEO, con Carlos Alzola y Juan María Nin en las instalaciones de ITP Aero

Bain: "Se cumple el compromiso"

A las porciones de Indra y Gobierno vasco hay que sumar otro porcentaje alrededor del 8% que queda en manos de JB Capital, el fondo de Javier Botín, lo que deja para Bain más de tres cuartas partes del accionariado, en torno al 77%. Es bastante más que lo anunciado (en un principio se había reservado para un consorcio español un 30% de la aeronáutica), si bien desde el fondo estadounidense se remarca que "se cumplen los compromisos" al haberse dejado abierta la puerta para que otros socios ocupen "hasta el 30%" del capital.

El acuerdo de compraventa con Rolls señalaba precisamente que Bain Capital debía estar abierto a "negociar la incorporación de más socios industriales españoles y vascos en el consorcio, que representen hasta un 30% del capital, hasta finales de junio de 2022". Los plazos en ese sentido se consumieron hace mucho tiempo.

Instalaciones de ITP en Zamudio

Mayoría clara en el consejo

El reparto final del accionariado, con Bain rondando el 80%, explica esa mayoría aplastante de representantes del fondo norteamericano en el consejo. Como avanzó Crónica Vasca el consejo de administración de ITP se ha cerrado con un total de 17 miembros de los que once, alguno con matices, corresponden a Bain.

El fichaje más relevante es el de Eva Azoulay, nueva CEO de la firma de Zamudio, a la que hay que sumar a Javier Lázaro, este con pasado muy reciente en Indra y por tanto una especie de consejero 'mixto', y otros nueve nombres más: Ivano Sessa, Tobias Weidner, Davide Vidotto, Andrea Filippa, Fátima Porras, Enrique Hernández Vitón, Javier Ortigosa, Andrej Busch y Enrique Parra.

Teniendo en cuenta que dos asientos son para los máximos directivos Carlos Alzola y Juan María Nin, quedan libres otras cuatro sillas más a repartir entre los demás socios. La tecnológica española controlada por la Sepi se asigna dos de ellas, el propio Marc Murtra y el militar Salvador Álvarez Pascual (indicativo del peso que va a tener el sector de defensa en la nueva andadura de ITP; también de la labor de vigilancia que aspira a ejercer el Ejecutivo de Pedro Sánchez) mientras que a JB le representa Miguel Azorín Aguirre y al Gobierno vasco Juan Alberdi, alto cargo del departamento de Hacienda y Finanzas que encabeza Pedro Azpiazu.

Partiendo de que Finkatuz tiene sobre la mesa nuevas operaciones no puede descartarse que Lakua opte por ampliar su porcentaje más adelante tal y como ha hecho en la guipuzcoana CAF. En todo caso cualquier hipotética operación en esa dirección parece quedar aplazada a después de las elecciones autonómicas.