Dos empresas farmacéuticas quieren adquirir parcelas de Arcelor en Zumárraga

Hace unos días, se cumplieron ocho años desde que el Gobierno vasco trasladara al Ayuntamiento de Zumárraga el cierre de la planta de ArcelorMittal. Desde entonces, más de 99.000 metros cuadrados están pendientes de un nuevo dueño, de empresas que activen el día a día de un solar que, en el último medio siglo, ha sido clave en el ámbito laboral de la localidad guipuzcoana. Después de recibir la negativa por parte de la empresa británica Plastic Energy para construir un Polo de Innovación de Economía Circular de Plástico, tanto el alcalde Mikel Serrano como la sociedad pública Sprilur, empresa que adquirió el terreno hace tres años, estudian cada proyecto con detalle.

Este medio digital informó hace unos días en exclusiva que rechazó implantar una empresa de armamento, ya que, según indicaron desde el Ayuntamiento, "no era nuestro prototipo de posibilitar este tipo de actividad en Zumárraga". Aún y todo, el propio alcalde ha aclarado siempre que la decisión de implantar o no una empresa no depende únicamente del Ayuntamiento, sino también "de otros responsables a los que hay que trasladar las propuestas", refiriéndose a la sociedad pública vizcaína, Sprilur. Cabe recordar que la empresa compró por siete millones de euros los terrenos de la multinacional del acero.

Desde el Ayuntamiento ya habían iniciado los primeros trámites antes del cambio de decisión por parte de Plastic Energy

Una de las decenas de propuestas que han recibido ambas partes y que, por ahora, no ha fructificado. La más reciente, y la que parecía definitiva, era la planta de reciclaje de plásticos que iba a estar situada en las primeras parcelas de ArcelorMittal, Plastic Energy. Como ya aseguramos en diciembre, desde el Ayuntamiento ya habían iniciado los primeros trámites antes del cambio de decisión por parte de los británicos. Según el Gobierno vasco, la razón se centra en lo medioambiental, algo que no gustó a la localidad guipuzcoana, ya que iba a suponer un incremento notorio de ingresos y más de 200 puestos de trabajo, "90 de ellos directos y unos 150 puestos mínimo indirectos". Además de ello, hubiera supuesto recuperar ese vacío financiero que no se ha rellenado desde el adiós de ArcelorMittal en 2016, ya que su marcha supuso una pérdida financiera de un 10-12% para el pueblo, es decir, entre 1.200.000 y 1.300.000 euros.

Aspecto actual de la antigua fábrica de Arcelor Mittal en la localidad guipuzcoana de Zumárraga. Crónica Vasca

"Esperemos tener pronto buenas noticias", comentaba Mikel Serrano, alcalde de Zumárraga, tras no concretarse el acuerdo con Plastic Energy. A día de hoy, hay diversas empresas interesadas, entre ellas, dos del sector farmacéutico, ambas europeas, una posibilidad que se ha visto con buenos ojos por parte del Ayuntamiento, ya que gracias al ecodiseño las industrias de este tipo han conseguido reducir su impacto medioambiental, tal y como lo refleja el Segundo Informe de Seguimiento del Plan Empresarial de Prevención de Envases del Sector Farmacéutico (PEP).

Subsanar el suelo, prioritario

Antes de nada, eso sí, Sprilur tiene previsto finalizar una hoja de ruta marcada desde principios del año 2023. El propósito: mejorar las condiciones de la antigua acería. Por ello, subsanará el suelo, además de encargarse de la reurbanización, rehabilitación y reconstrucción del ámbito industrial. Una vez realizada la remediación de la superficie, algo primordial teniendo en cuenta que ArcelorMittal ha ocupado esos terrenos durante los últimos 50 años, buscará corregir ciertos desperfectos en algunas cubiertas.

Aproximadamente 9.000 metros cuadrados de los 99.400 totales serán demolidos y también se encargarán del afloramiento del río Urola

Aproximadamente 9.000 metros cuadrados de los 99.400 totales serán demolidos. También se encargarán del afloramiento del río Urola, que cruza a escasos metros del solar y también de la estación de tren de Zumárraga. Esta lista se irá completando paso a paso hasta tener todo completado y, una vez realizado todo, se da a entender que los antiguos pabellones de ArcelorMittal serán, ocho años después, ocupados por empresas que permitirán aumentar ingresos y generar puestos de trabajo a la localidad guipuzcoana. 

Miles de trabajadores de Arcelor Mittal de Zumárraga, durante la manifestación en 2016. EFE