El magnate vasco dueño de Keralty Joseba Grajales denuncia al presidente de Colombia Gustavo Petro

El magnate vasco dueño de Keralty Joseba Grajales denuncia al presidente de Colombia Gustavo Petro

Empresas

El magnate vasco dueño de Keralty, Joseba Grajales, denunciará al presidente de Colombia, Gustavo Petro

El empresario responde a las acusaciones del presidente del país latinoamericano de financiar ilegalmente campañas políticas

M. A. Lertxundi
Publicada
Actualizada

Cisma mayúsculo entre el conocido empresario vasco Joseba Grajales y Gustavo Petro a causa de unas declaraciones en las que el presidente de Colombia acusa al dueño de Keralty de "criminal" por supuestamente haber financiado campañas políticas en el país.

Según informa Efe, este martes por la noche el presidente del país latinoamericano lanzaba durísimas acusaciones hacia la compañía sanitaria en el país Sanitas, del grupo de Grajales, y hacia el propio empresario alavés por esas supuestas financiaciones de partidos políticos, aunque no se detalló cuáles.

En concreto, Petro dijo que Grajales "es un criminal en Colombia y debe irse", tal y como recoge la citada agencia, lo que ha generado una rápida respuesta por parte del empresario vasco todo ello en un contexto de férrea crítica del presidente colombiano hacia algunas compañías privadas de salud.

Acciones legales

Grajales ha respondido a Petro, que incluso planteó la posibilidad de utilizar al rey Felipe VI de mediador para que Sanitas salga del país. En su respuesta, el dueño de Keralty anuncia acciones legales en "tribunales nacionales e internacionales" frente a las acusaciones de Petro.

Según Grajales, las acusaciones son una reacción a un "reciente fallo de la Corte Constitucional que declara ilegal la intervención" del Gobierno colombiano en Sanitas, que en su opinión, "marca un hito claro en la defensa de la legalidad, de los principios y de nuestro propósito".

"Las reacciones del presidente Gustavo Petro y algunos de sus colaboradoresno solo constituyen un atropello a las instituciones, sino una campaña sistemática de desinformación, plagada de mentiras, calumnias e insultos que buscan socavar, sin fundamento alguno, la legitimidad de nuestro trabajo, el valor de nuestra historia y la reputación de quienes lideramos con responsabilidad y compromiso", señala Grajales.