Euskadi como plató de España
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En esta semana tan intensa informativamente hablando podríamos hablar de los resultados, la mayoría con fuertes beneficios, de muchas de las grandes empresas vascas como Eroski, CIE Automotive o Gestamp. Podríamos hablar también, como habla todo el mundo en las élites económicas y políticas, de la posible fusión entre BBVA y Sabadell. O podríamos hablar, por supuesto, de las elecciones catalanas que se celebran este domingo.
Sin embargo, aun a riesgo de parecer demasiado originales, preferimos hablar de otra cosa: los incentivos fiscales al cine en Euskadi.
Euskadi se está convirtiendo en tierra de cine, en una suerte de plató para toda España, porque aquí cada vez se ruedan más películas, más series y más documentales. Esto no es casual. Ocurre porque las diferentes diputaciones ponen en marcha incentivos fiscales para la industria del cine. En Bizkaia, donde empezó todo, hubo 150 rodajes en 2023. Datos tremendos que ahora pueden repetirse en las otras provincias vascas.
En Gipuzkoa han aprobado esta semana, como les hemos ido contando, unos incentivos fiscales a la cultura en sentido amplio pero que centramos en el cine como parte más potente de esa industria. Y, según nuestras fuentes, la Diputación de Álava podría hacer algo similar en pocas semanas.
Estos beneficios fiscales hacen Euskadi más atractiva para que puedan venir empresas y rodajes. Para que, en definitiva, continúe esa especie de boom que estamos viviendo en los últimos años. Hay que celebrar e incluso incentivar esto tanto desde las instituciones como desde otros ámbitos como el periodístico para que las cosas sigan por esta senda.
Además, hay que tener en cuenta que esta atracción a la industria del cine también guarda relación con el final del terrorismo de ETA. No se puede ni se debe olvidar que aquí, en Euskadi, hubo una banda terrorista que amenazaba, hostigaba y asesinaba y, por ello, impedía que la comunidad creciera. Lo hacía en el ámbito económico en general pero también en el del turismo en particular y, por ello, afectaba a cuestiones relacionadas como esta que estamos comentando.
La conjunción de los factores citados impulsa ese boom de la industria del cine en Euskadi. Hay que aplaudir y respaldar, repito, esos incentivos fiscales para que aquí cada vez haya más rodajes y para que florezcan también empresas vascas en torno a este negocio. Algo positivo que celebrar en momentos tan convulsos.