Urkullu se desmarca otra vez del caso De Miguel que afecta al PNV: "Mi conciencia está tranquila"

La tónica del PNV es la misma: desmarcarse del mayor escándalo de corrupción en la historia reciente de Euskadi. El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que tiene "la conciencia tranquila" sobre el denominado "caso De Miguel", que le provoca "tristeza" por el hecho de que los condenados fueran del PNV, pero también "satisfacción" por el trabajo desempeñado por la Ertzaintza y los servicios jurídicos del Gobierno Vasco.

El lehendakari ha recalcado, en declaraciones a los periodistas en San Sebastián, que la sentencia sobre este caso es un "recordatorio de lo que es y tiene que seguir siendo la interpretación y el ejercicio de la política al servicio del bien común". Urkullu se ha pronunciado sobre esta cuestión después de que el pasado martes se conociera la sentencia firme del Tribunal Supremo, que rebaja ligeramente las condenas impuestas en este caso contra tres exdirigentes del PNV y un exdirector del Gobierno Vasco, con penas que van de 5 a 12 años de cárcel, por lo que entrarán en prisión.

Iñigo Urkullu en noviembre de 2019, cuando pidió disculpas por el caso. / Efe

El lehendakari ha reconocido que siente "tristeza" por el hecho de que los condenados en este proceso fueran "afiliados" al PNV y también por sus familiares y allegados. Al mismo tiempo, ha señalado que también siente "orgullo" por la actuación de su partido, ya que tanto el exdiputado general de Álava Xabier Aguirre, como el propio PNV "supieron reaccionar" ante "el riesgo" de que se pudiera "ensuciar el nombre orgánico del PNV" y fueron "ejemplo de lo que luego pudiera ser la gestión de este tipo de situaciones".

"Tengo la conciencia tranquila de haber ponderado desde el inicio hasta el final lo que era una situación en la que había que conjugar la presunción de inocencia, dar tiempo a los procesos y procedimientos judiciales"

Asismimo ha expresado su satisfacción por el trabajo desarrollado por la Ertzaintza, por los servicios jurídicos del Gobierno Vasco, y por la decisión del Gobierno Vasco y del Departamento de Gobernanza Pública de personarse en la causa.

"Tengo la conciencia tranquila de haber ponderado desde el inicio hasta el final lo que era una situación en la que había que conjugar la presunción de inocencia, dar tiempo a los procesos y procedimientos judiciales", a la vez que se actuaba con "firmeza en la toma de decisiones delicadas" como las adoptadas "en aquel momento".

En su opinión, la sentencia debe ser, en todo caso, un "recordatorio" para él y también para los "miles de militantes del PNV y los cargos institucionales, desde concejales hasta el propio lehendakari, de lo que es y tiene que seguir siendo la interpretación y el ejercicio de la política al servicio del bien común". "Euskadi es el bien común", ha concluido