Los socios del Ejecutivo vasco, PNV y PSE-EE, han hecho naufragar una iniciativa del PP Vasco y Elkarrekin Podemos-IU, para que el Parlamento creara una comisión especial para investigar los responsabilidades políticas del Departamento vasco de Educación en la contratación de Joanes Labayen como asesor puntual durante la crisis del transporte escolar al inicio de este curso académico.
La propuesta, rechazada con los votos en contra de todo el Gobierno vasco, ha sido apoyada en bloque por el resto de grupos parlamentarios en la oposición, incluidos EH-Bildu y Vox que han coincidido en el sentido de su voto, algo muy poco habitual. Esta propuesta fallida, tenía como objetivo investigar la contratación de Labayen, miembro del consejo de administración de Autocares Urpa S.L, a la que adjudicaron 15 rutas de transporte escolar en Gipuzkoa por valor de 4 millones de euros, durante una de las últimas crisis que ha traspasado el Departamento que dirige el consejero Jokin Bildarratz.
Un conflicto sobre el que el consejero explicó en su día en comisión parlamentaria que la contratación de Labayen había sido ética y legal, y negó cualquier conflicto de intereses. Aunque sí admitió que debería haber dado explicaciones previas.
En el texto registrado por la coalición morada y los populares, se recordaba que el pasado 22 de septiembre "se hicieron públicas ciertas informaciones que apuntaban la existencia de un posible conflicto de intereses en la adjudicación de contratos de transporte escolar por parte del Departamento de Educación del Gobierno vasco". Así, ambos partidos, destacaban en su iniciativa que el Departamento de Educación contrató como asesor externo y mediador a una persona que, a su vez, es consejero y secretario "de una de las empresas concurrentes al concurso público".
"Una incompatibilidad ética y profesional"
Durante el debate de esta iniciativa parlamentaria, la portavoz de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, ha reclamado que la comisión de Educación aclare si hubo o no "conflicto de intereses" en aquella adjudicatura, y ha denunciado la "gestión mala e insuficiente" del consejero Bildarratz, cuyas explicaciones posteriores al conflicto del transporte, no aclararon lo sucedido.
En una línea similar, el parlamentario del PP vasco, Carmelo Barrio, ha coincidido con las denuncias de Gorrotxategi y ha asegurado que Bildarratz, en su comparecencia parlamentaria, "no convenció", sino que trato de hacer "parecer normal lo que no es normal", cuando en aquella polémica se dio "una incompatibilidad ética y profesional".
Por su parte, el parlamentario de EH-Bildu, Ikoitz Arrese, quien en las últimas semanas ha insistido mucho con la ley de educacióny la permanencia de los modelos lingüísticos, ha aseverado que la cuestión a debatir en el pleno de este jueves no trataba sobre es si este tipo de prácticas "son o no legales, sino si son éticas o no". "Este gobierno ha echado balones y fuera y ha dado explicaciones cuando se conocían los supuestos chanchullos", ha denunciado.
También en favor de esta iniciativa, José Manuel Gil, de Ciudadanos, ha considerado que el citado contrato es "un incidente más en la desastrosa trayectoria" de Bildarratz, y ha criticado tanto los "desatinos" del consejero, como la "impunidad" con la que actúa el PNV. Por su parte, la parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha pedido aclarar aquellas dudas "razonables", y ha denunciado que la contratación de Labayen "no tiene un pase desde un punto de vista ético y estético".
En la oposición a la iniciativa conjunta de PP y Podemos, el representante del PNV, Gorka Álvarez, ha salido en defensa de su compañero de partido, y ha asegurado que Bildarratz "hizo un ejercicio de transparencia", al tiempo que ha acusado a los proponentes de la comisión de generar "ruido político" y llevar esta iniciativa al pleno porque "no les importa el transporte escolar y sí el rédito político".
Una línea similar a la de María Jesús San José (PSE-EE), quien ha negado cualquier tipo de irregularidades o conflicto de intereses, ha premiado la "celeridad" con la que Bildarratz ofreció explicaciones "precisas y profundas" en la Cámara vasca y ha cuestionado la utilidad de una comisión pensada para "sacar rédito político".