Erkoreka sugiere una estrategia política en los recientes altercados violentos contra la Ertzaintza

Los partidos del Athletic Club-Atlético de Madrid y Real Sociedad-Mallorca que se realizaron la semana pasada en Bilbao y San Sebastián, y la manifestación por el 48 aniversario de las cargas policiales del 3 de Marzo en Vitoria tienen algo en común. Los tres acontecimientos dejaron varios choques protagonizados por los agentes desplegados de la Ertzaintza y aquellos colectivos e individuos que se dedicaron a provocar altercados de gran violencia. 

Unos sucesos cuya responsabilidad no está todavía clara, pero que el vicelehendakari y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, ha asociado este martes a ciertas "organizaciones políticas" que ahora, durante el contexto prelectoral de las autonómicas del 21-A, presentan "un semblante pacífico", mientras que desde "la trastienda anima a estas actitudes violentas".

El consejero, mano derecha del lehendakari, Iñigo Urkullu, durante los últimos 12 años y que tras este mandato abandonará su cargo, ha realizado estas declaraciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. Y aunque no ha mencionado directamente a EH Bildu, ha incidido en que "hay a quién la interesa dar una imagen civilizada en el escaparate". Aunque ha matizado que sus sospechas son "irrelevantas", y ha descartado apostar por si este tipo de actuaciones "están animadas por una ideología u otra", sí ha asegurado que esto "no ocurre sin más, sino porque alguien lo organiza".

"La pregunta es quién está organizando estas cosas en diferentes lugares?, ¿a quién ahora le interesa hacer un doble juego y dar una imagen civilizada en el escaparate, pero luego en la trastienda tener todo este juego y esta estrategia que puede erosionar la sociedad, la convivencia y quizá a otras formaciones políticas?", ha señalado el vicelehendakari. Este, además, ha ironizado con que durante los últimos 30 años en Euskadi "lo habitual", siempre ha sido que estos grupos de encapuchados dedicados a organizar altercados violentos "no han estado nunca relacionados con determinados partidos políticos”. Una referencia directa a los entornos de la izquierda abertzale.  

Contexto preelectoral

Con el tablero de juego ya desplegado para las autonómicas vascas del próximo abril, Erkoreka ha evitado dar su opinión expresa sobre si estos sucesos están motivados "por una ideología u otra". Aunque sí ha matizado que es una cuestión que se hace parte de la sociedad en un momento preelectoral donde, "ya nadie preconiza al uso de la violencia en la calle, la ruptura de la convivencia a través de la lucha, del enfrentamiento y ya nadie dice que hay que acabar físicamente con el contendiente político, ni tan siquiera soterradamente", ha manifestado.

Por esta razón, a su juicio, "no es casualidad" que los diferentes grupos políticos rivales no dejen pasar la ocasión para que actos multitudinarios como partidos de fútbol o grandes movilizaciones como la del 3 de Marzo "afloren automáticamente embozos para taparse la cara, chotos para cubrirse la cabeza, de manera que sean irreconocibles y, a partir de ahí, se utilicen todos los instrumentos propios de los ataques en los altercados conocidos y homologados en todo el mundo,".

Estas declaraciones de Erkoreka han tenido poco después de que la Ertzaintza incautara numerosos objetos peligros como barras de metal, piolets, palos de golf o navajas en una operación en la que se ha identificado a medio centenar de seguidores de riesgo de la Real Sociedad. Un operativo en el que se ha localizado a otro centenar de hinchas del PSG que viajaban hacia la capital guipuzcoana y a los que también se les han requisado numerosos objetivos cuya función podía servir para actuar con violencia.

Además, a la espera de lo que pueda ocurrir en el partido de este martes entre la Real y el PSG, el consejero de Seguridad ha defendido las actuaciones de los ertzainas durante la semana pasada, asegurando que los criterios "son siempre los mismos, de proporcionalidad", y destacando que todos los altercados de la semana pasada tuvieron un punto en común: que había un grupo organizado que fue "deliberadamente a esas concentraciones dotadas con recursos, con la actitud y la disposición de generar altercados".