Podemos y Sumar desoyen la propuesta de 500 simpatizantes para "recuperar la unidad"
Desde la formación magenta, su candidata a lehendakari en el 21-A, Alba García, llama a "no cometer el mismo error" que en las elecciones vasca; mientras que los morados optan por el silencio
3 mayo, 2024 05:00Han pasado casi dos semanas desde las autonómicas vascas del 21-A. Una noche en la que, como ya venían avisando las encuestas -incluso las elecciones gallegas-, se consumó el desastre para la izquierda confederal. Después de ocho años y dos legislaturas en el Parlamento vasco, Podemos, otrora una de las fuerzas más votadas en Euskadi, quedó fuera de la cámara autonómica. Ni siquiera la popularidad y el recorrido de su candidata, Miren Gorrotxategi, fueron suficientes para mantener un escaño por Bizkaia que hubiera evitado su completa desaparición.
Poco mejor le fue a Sumar. Los de Yolanda Díaz lograron un solo escaño por Álava que no ocupará su candidata a lehendakari, Alba García. Sino que este asiento corresponde a Jon Hernandez Hidalgo, secretario general del Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK), cabeza de la lista por este Territorio Histórico y, junto a la parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, uno de los primeros en recoger su acta como parlamentario. Ambos lo harán este viernes.
El naufragio de ambas formaciones no fue ninguna sorpresa. La gran mayoría de previsiones les dejaban ya fuera, y para evitarlo, antes de las elecciones, incluso antes de que se consumara la ruptura entre Podemos y Sumar, hubo un sector de la formación morada que apostaba con énfasis por la composición de una candidatura conjunta.
Incluso, ya cerca de la recta final y justo después de las autonómicas en Galicia -donde ambos partidos se quedaron sin representación-, Gorrotxategi, planteó la opción de echarse a un lado para que el espacio de la izquierda confederal no fuera por separado. Todo esto, sin embargo, quedó en nada y la izquierda más allá del PSE-EE perdió cinco de los 6 escaños que mantenía hasta ahora en la Cámara autonómica.
'Elkarrekin Sumar Bai'
Ahora, con el resultado del 21-A ya asentado, un grupo de 506 simpatizantes de los diferentes partidos de este espacio -donde se incluye también Ezker Anitza, Berdeak Equo o Alianza Verde-, han vuelto reclamar la "recomposición" de este proyecto político tras las elecciones europeas del 9 de junio. Un conjunto de exdirigentes políticos, sociólogos e intelectuales afines a este espacio, entre los que figuran el exsenador del PSE-EE y exportavoz de Gesto por la Paz, Imanol Zubero; los portavoces de Elkarrekin en las Juntas de Bizkaia, Eneritz de Madariaga y Richard Vaquero; o el exprofesor y catedrático de la UPV/EHU, Koldo Unceta.
Este movimiento, bajo el nombre de 'Elkarrekin Sumar Bai', nace con el fin de retomar una causa que se da ya casi por perdida y ponerle fin a lo que ellos valoran como una división suicida" que ha dejado "una representación mínima" de este espacio político en las instituciones vascas. Especialmente en el Parlamento. Para ello han convocado para el próximo sábado 11 de mayo una asamblea en Bilbao.
La iniciativa, según señala Zubero a Europa Press, pretende establecer en Euskadi "un espacio de izquierda vasquista no nacionalista alternativa y transformadora". Pero explica que durante la campaña de las autonómicas optaron por mantenerse ajenos a los comicios para "no hacer ruido" y recuperar el debate tras los comicios. "La unidad era importante antes, pero es mucho más importante ahora", explicó el exsenador socialista, que insiste en que la idea es similar a la de antes de los comicios "porque hace mucha falta". Especialmente tras unas elecciones que han dejado a este espacio muy "debilitado".
Sin embargo, parece que lo ocurrido en Galicia y posteriormente en Euskadi no ha sido suficiente para que cambiar la postura de Sumar o Podemos. Ni siquiera la amenaza de una nueva debacle en Cataluña. De hecho, este jueves, en una entrevista para Radio Euskadi, la candidata a lehendakari de la coalición magenta, Alba García, mostró su "respeto" ante esta iniciativa lanzada con el fin de "intentar llegar a acuerdos", y admitió que la separación de este espacio pudo ser "un error"; pero incidió en que este "no es el momento" para hablar sobre una firma de 'paz' entre Podemos y Sumar.
Por su parte, en Podemos optan por ahora por no pronunciarse sobre esta cuestión. Expresan su "respeto a esta y otras iniciativas que puedan surgir", pero deciden mantenerse en silencio al igual que hicieron antes de las autonómicas "cuando sumar rompió cualquier posibilidad de acuerdo".