Los deberes de los políticos vascos ante las asignaturas de septiembre.

Los deberes de los políticos vascos ante las asignaturas de septiembre. CG

Política

Los deberes de los políticos ante los exámenes de septiembre

Hacer frente a los aranceles, negociar un SMI vasco o consensuar la ley del euskera son los principales retos tras el verano

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En estos días de verano los políticos de Euskadi tienen muchos deberes porque en septiembre vienen exámenes importantes en distintos ámbitos. En el mundo económico y empresarial quizás el principal sea el asunto arancelario.

El Gobierno vasco ya ha anunciado que se va a reunir con las empresas más afectadas por la imposición de aranceles de Estados Unidos. En las reuniones buscarán implementar más ayudas o buscar soluciones para frenar el impacto, ya cifrado en más de 300 millones de euros, para esas compañías que exportan al país norteamericano.

Desde el punto de vista laboral, la clave está en la negociación de un salario mínimo interprofesional para Euskadi, que es uno de los temas que va a marcar el próximo curso político. Los sindicatos ya han recogido más de 100.000 firmas que lo reclaman. Unos y otros tienen que ponerse las pilas para negociar un acuerdo satisfactorio para todos que no parece sencillo.

Y si pensamos en la parte política, el examen será la ley del euskera, sobre todo pensando en las OPE, para delinear cómo se tienen que examinar los aspirantes a funcionarios en Euskadi. Este es un asunto que está enfrentando a los socios del Gobierno vasco, PNV y PSE.

Porque hay más sintonía entre nacionalistas, PNV y Bildu, frente a la apuesta del PSE y de otros partidos aún más críticos con este tema. En este caso se debe buscar un consenso porque el euskera es de todos y lo más razonable es buscar una ley que no deje a nadie atrás, hable más o menos dicho idioma.

Esos son, a grandes rasgos, algunos de los principales deberes que tienen los políticos vascos en este verano porque las asignaturas que llegan en septiembre no son sencillas. Los desafíos son grandes y aquí se los seguiremos contando tras las vacaciones, creo que merecidas.