Las cifras económicas de la Copa del Mundo de Qatar

Levantar una Copa del Mundo es un hito deportivo que todo país sueña con alcanzar alguna vez en su historia. España tuvo la suerte de hacerlo en 2010 con una plantilla única, liderada por Vicente del Bosque. Pero no todos los países están capacitados para competir al máximo nivel del fútbol. Algunos se deben conformar con intentar acoger esta competición y ser el organizador junto a la FIFA para que todo funcione según lo habitual.

Qatar es el último ejemplo de ello. Sin tradición futbolística a sus espaldas, aunque sí con mucha potencia económica, convenció al máximo organismo de ser la mejor sede posible. Aparte de poner en el mapa al país para el gran público, otro motivo para pedir organizar este tipo de campeonatos es por todos los ingresos que generan en el territorio. Además, en este caso, también hay interés político, se trata de modernizar y dar una imagen diferente a la prestablecida.

Inversión y previsiones

Para esta edición inédita que arrancará el próximo 20 de noviembre, y según los datos oficiales, la inversión del país asiático ha sido de más de 1.600 millones de euros. Se han construido un total de ocho estadios, algunos desde cero y que nada tienen que envidiar a los de países con más tradición. Por ejemplo, el Estadio Lusail, que será escenario de la final, puede albergar hasta 80.000 asistentes. Luego es toda una incógnita: ¿qué futuro tendrán una vez pase el acontecimiento?

El último Mundial celebrado, en Rusia 2018, dejó más de 14.000 millones en la zona, una cifra mayor de lo esperado. Por lo que han calculado Qatar y la FIFA, en esta edición serán más de 20.000 millones de euros lo que se genere en la economía del país. Además, tienen la confianza de que signifique un impulso turístico para la región y que repercuta en un mayor impacto de visitantes en los próximos años.

Los favoritos al título según los pronósticos

Una de las cifras que siempre llaman la atención de los aficionados es la que se embolsa el ganador del campeonato. En esta edición serán unos 42 millones de euros para quien alce el tan deseado título. Según las apuestas del Mundial de fútbol de Qatar, que se pueden consultar en https://www.oddschecker.com/es/futbol/internacional/mundial la etiqueta de favorito se la reparten Brasil, con más opciones, junto con Francia, Inglaterra y España. ¿Aprovechará la canarinha disponer de una plantilla de ensueño?

Aficionados de Brasil viendo un partido por televisión / UNSPLASH

Cabe comentar que, aparte de determinar el ganador total de esta competición y de muchas otras, estas casas de apuestas permiten a los diferentes usuarios varias posibilidades como prever el ganador de un choque o quién quedará primero de un grupo concreto. Además, presentan varias opciones como el hecho de crear pronósticos combinados de más de un encuentro o deporte, o la opción de acogerse a una de las diferentes promociones de bienvenida disponibles.

España, a por el Mundial 2030

El año pasado se dio a conocer oficialmente que España y Portugal, junto a sus federaciones de fútbol, presentaban la candidatura para organizar el Mundial de 2030. Esta candidatura ibérica compite con dos más, de momento. La más potente es la que conforman cuatro países de la Conmebol que son Uruguay, Argentina, Paraguay y Chile para conmemorar el centenario de la primera Copa del Mundo. Menos opciones se le dan a Marruecos, que lleva siete ediciones intentándolo sin éxito.

Se saldrá de dudas en marzo del próximo año, que es cuando la FIFA organiza su congreso anual. Hay poca información al respecto, aunque la UEFA, el máximo organismo europeo, da apoyo incondicional a la candidatura ibérica. Ambos son países con mucha cultura futbolística y cuya inversión sería mínima, pues ya llevan tiempo remodelando los estadios y adaptándolos a las nuevas normativas.

Ejemplo de esto último es el nuevo San Mamés o la remodelación de Anoeta, dos de los 15 estadios que la Real Federación Española de Fútbol está considerando presentar como sede. Tienen muchos números de que así sea, pues son obras recientes y en las que la inversión económica sería muy baja. Ahora cabe ver cuál será la última propuesta de la candidatura ibérica a la FIFA y qué papel tendrá el País Vasco en ella.

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Artículo elaborado en colaboración con Dianne Gusman