Osakidetza realiza casi dos de cada diez trasplantes menos por la pandemia

El Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, ha realizado 223 trasplantes en la Comunidad Autónoma Vasca, alrededor de medio centenar menos que hace un año. Este 2020, marcado por la pandemia, el Hospital Universitario de Cruces en Barakaldo se ha encargado de este tipo de intervenciones que han bajado un 17,2%. En total Euskadi ha llevado a cabo 152 trasplantes renales y 71 hepáticos en la red de centros sanitarios vascos. 

La cantidad de estas intervenciones es notablemente inferior a la de años anteriores, 48 menos, donde la cifra se acercaba más a los 300 (271 en 2019). Esta situación ha generado que no se realice ningún trasplante pulmonar o cardíacos, como se venía haciendo en pasadas ocasiones. El Gobierno vasco ha dado a conocer esta información por la solicitud que hizo el parlamentario Carmelo Barrio, del PP vasco. Esta bajada en los trasplantes se debe principalmente al coronavirus y sus consecuencias derivadas como pueden ser la bajada en los accidentes de tráfico por las restricciones de movilidad impuesta por el estado de alarma. 

A pesar de esta reducción Euskadi continúa siendo un referente a nivel nacional en este servicio sanitario. De los trasplantes realizados el año pasado 11 pertenecían a pacientes otras comunidades autónomas. Osakidetza registró el año pasado 65 donantes por millón de habitantes debido al gran compromiso por parte de la sociedad vasca, cifra que se ha visto algo mermada durante este año por la crisis sanitaria. Sin embargo, Euskadi mantiene un buen ritmo de intervenciones de este tipo. Un total de 2.584 personas han sido trasplantadas en la última década en la CAV.  

La pandemia también ha hecho estragos en la lista de espera de las operaciones del servicio de cirugía. La covid-19 ha retrasado 15 días las operaciones en los hospitales vascos. Las listas de espera eran de 49 días y ahora son de 64, debido a la ocupación de las camas por pacientes infectados de coronavirus. Respecto a esta ocupación la directora general de Osakidetza, Rosa Pérez reconoce que está “dificultando poder programar operaciones” como les gustaría. En la medida de lo posible y según la ocupación de las camas covid disminuya, la intención es volver a los baremos del año 2019 y programar más intervenciones quirúrgicas. Entre estos objetivos a futuro también está reforzar la Atención Primaria. Sin embargo, la realidad es otra porque este tipo de servicios lleva ya un año sufriendo las consecuencias de la pandemia y las esperas y demoras continúan.