Arzalluz tiene mucho por demostrar en el Guggenheim

Miren Arzalluz es la nueva directora del Museo Guggenheim Bilbao. Si se tiene en cuenta su extenso y exitoso currículum en el mundo del arte, estamos ante un nombramiento merecido. Pero la elegida tiene mucho que demostrar en la principal pinacoteca de Euskadi. 

Porque sobre la designación de Miren Arzalluz es fácil lanzar sospechas, teniendo en cuenta su apellido. Su padre era Xabier Arzalluz, histórico presidente del PNV. Y ello, unido a que unos cuantos jeltzales decidían quién lideraría el museo, constituye el caldo de cultivo perfecto para las acusaciones de nepotismo o enchufismo. 

Quienes conocen a la elegida no tienen dudas. Repetimos que su currículum es intachable. Y, por ello, justo es darle un voto de confianza. Pero, nos guste o no, la directora del Guggenheim tiene mucho trabajo por delante para disipar esas sospechas.