
Los convenios vascos viven un año de transición a las puertas de un nuevo frente en el metal
Los convenios vascos viven un año de transición a las puertas de un nuevo frente en el metal
Casi la mitad de los trabajadores vascos tiene su convenio vigente actualmente
La subida en los convenios vascos fue del 3,65% en 2024, el mayor incremento de España
Euskadi se prepara para un 1 de mayo insólito, protagonizado por contados, pero fuertes conflictos laborales que han marcado el paso de la economía vasca estos últimos meses, pero sumido a su vez en una impropia ‘calma’ en lo que a negociación colectiva se refiere.
Los sindicatos vascos ultiman ya las movilizaciones que tendrán lugar este jueves en las tres capitales vascas con motivo del Día del trabajador, con la reducción de la jornada laboral, el fin de la guerra y el ya tan conocido SMI propio, entre sus principales reivindicaciones.
Y es que el final de 2024 y estos cuatro primeros meses del año, a diferencia de fechas anteriores, han estado marcados por una cierta tranquilidad en el ámbito de la conflictividad laboral, únicamente alterada por los ERE en Guardian, Astilleros Balenciaga o el ahora en negociaciones de Bridgestone, que afectará al 40% de la plantilla total.
Bajo todo este contexto, el foco está puesto en el ámbito público donde las grandes protagonistas han sido las numerosas jornadas de huelga en Educación -en busca de la renovación del convenio y de mejoras en las condiciones laborales- que paralizaron y previsiblemente paralizarán -entre los próximos 12 y 16 de mayo- el territorio.

Imagen de archivo de una manifestación por renovación de convenio
Casi el 50% de los trabajadores tiene su convenio vigente
Esta cierta calma que atraviesa el escenario laboral vasco vendría provocada, en gran medida, por el porcentaje de trabajadores que tenía vigente su convenio a marzo de este año. Una cifra que si bien ha bajado nueve puntos respecto al mismo mes del año pasado, continúa siendo alta pues refleja que en torno al 50% de los trabajadores de Euskadi se rige por un convenio vigente.
Convenios actualizados que han supuesto un incremento salarial medio en 2025 del 3,12%, subida que asciende al 3,16% en caso de los acuerdos en Euskadi y que baja al 2,99% en caso de los convenios estatales con incidencia en Euskadi.
Mientras, el otro 48% de los trabajadores vascos, mantiene estos acuerdos en situación de prórroga, empleados entre los que se encuentran los de Construcción y Alojamientos en Gipuzkoa; Limpieza de Edificios y Locales, Construcción y Transportes de Mercancías en Bizkaia, y los de Limpieza de Edificios y Locales en Álava.
Así, tal y como ha adelantado Crónica Vasca, los empleados de Tubacex, inmersos en la negociación del convenio caducado el pasado 31 de diciembre; o los de Sidenor Azkoitia, con la negociación prácticamente en ‘vía muerta’ tras el rechazo de ELA y LAB a la propuesta de la compañía.

Trabajador del metal
Fin del convenio del metal
Una aparente calma que marca la diferencia con años anteriores -2023 especialmente marcado por la negociación de los convenios en Mercedes, Michelin y el sector del metal- pero que podría tornarse en conflictividad a finales de año, cuando se acerque la fecha de caducidad precisamente de los convenios de este último en Bizkaia y Álava.
Convenios que afectan a un importante porcentaje de trabajadores en Euskadi -en Bizkaia en torno a 55.000 personas y en Álava en torno a 20.000- y que se firmaron hace dos años con caducidad a fecha del 31 de diciembre de 2025, tras meses de arduas negociaciones.

Jornada de huelga en la planta de Bridgestone Basauri
Bajada de tensión a pesar de los conflictos activos
De esta manera, Euskadi atraviesa momentos de calma a pesar de los importantes conflictos que han sacudido o están sacudiendo la industria vasca.
Conflictos entre los que resaltan especialmente el ERE activado de manera inesperada por la multinacional norteamericana Guardian, la búsqueda de inversores por parte de la histórica Astilleros Balenciaga o la activación de un ERE en la planta de Bridgestone Basauri para dar salida al 40% de la plantilla, 335 trabajadores.