Política

Los Presupuestos siguen su cauce tras el rechazo de PNV y PSE a las enmiendas de la oposición

Las cuentas se aprobarán 11 febrero al no haber salido adelante las enmiendas defendidas por separado por EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP + Cs, y Vox

29 enero, 2021 15:44

Los partidos de la oposición han reafirmado su rechazo al proyecto presupuestario vasco para 2021 por considerarlo "continuista" e insuficiente para hacer frente a la crisis de la covid-19, mientras que PNV y PSE les han reprochado su "autoexclusión" de la negociación de las cuentas.

El proyecto ha superado este viernes el primer trámite parlamentario para su aprobación definitiva el próximo 11 febrero, al no haber salido adelante las enmiendas a la totalidad defendidas por separado por EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP + Cs, y Vox.

En un largo pleno en el que cada partido ha defendido su enmienda, que ha sido replicada a su vez por las formaciones que integran el Gobierno vasco, la oposición ha expuesto sus criticas a estas cuentas, las primeras de esta legislatura para el gabinete de Iñigo Urkullu.

Nerea Kortajarena (EH Bildu) ha lamentado que la "realidad ha arrasado" con las previsiones del proyecto porque dibujan unos "presupuestos ordinarios para una situación totalmente extraordinaria". "La resaca de la ola ha arrastrado el presupuesto antes de ser aprobado", ha afirmado Kortajarena, ha hecho hincapié en que el Gobierno vasco "ha fracasado" en su intento de ampliar acuerdos tras denunciar que rechazó la propuesta de su coalición "sin sentarse a debatirla".

La portavoz de Elkarrekn Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, que ha hecho una breve referencia a las vacunaciones indebidas, ha denunciado que el proyecto "no está a la altura" del actual "reto histórico", ya que denota una visión de la crisis "como algo pasajero", por lo que ha demandado un presupuesto que contenga "modificaciones estructurales y no solo coyunturales".

El parlamentario de esta coalición Jon Hernández ha defendido que su grupo estaba dispuesto a negociar, disponibilidad que según ha dicho no fue correspondida por el Gobierno vasco, que se negó a "hablar de contenidos", entre los que ha citado la fiscalidad.

El portavoz de PP+Cs, Carlos Iturgaiz, ha vuelto a reclamar la dimisión o el cese de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, para a continuación defender su enmienda como "única alternativa" para aumentar las inversiones en sanidad y en infreaestructuras y para "salvar los puestos de trabajo".

Ha reprochado al Ejecutivo de Vitoria que "nunca ha tenido intención de negociar" con su coalición un presupuesto "cerrado y finiquitado", mientras que la portavoz de Vox, Amaia Martínez, ha calificado el proyecto de "continuista, alejado de la realidad, e irresponsable".

PNV y el PSE-EE lamentan la falta de apoyo

Las intervenciones de la oposición han sido respondidas por los parlamentarios del PNV Joseba Egibar e Itxaso Berrojalbiz y del PSE-EE Susana Corcuera, que han insistido en defender las cuentas y en lamentar que no hayan logrado ningún apoyo del resto de partidos.

Egibar ha contestado a EH Bildu que su actuación en Euskadi responde a "estrategia pura y dura y no a ideología" porque sí que es capaz de llegar a acuerdos en Madrid y en Navarra. "EH Bildu ha cambiado el campo de juego para atender sus urgencias propias: Es el denominado acuerdo 5 a la semana", ha asegurado, en referencia al acercamiento de presos de ETA.

Berrojalbiz ha reprochado a Elkarrekin Podemos-IU que no prosiguiese con la negociación al subrayar que "cuando uno quiere pactar no se asusta". También se ha dirigido a PP+Cs para acusarle de "autoexcluirse" de la negociación y de usar "falsos argumentos" para oponerse a unos presupuestos "valientes".

En la misma línea, Corcuera ha opinado que EH Bildu "ha dejado pasar el tren cuando peor lo estaba pasando la sociedad vasca" y ha lamentado que a la coalición "todavía le queda lejos ser responsable con el país" porque está condicionada por "presiones y tacticismos".

Asimismo, ha considerado que la coalición morada "no ha estado a la altura" y no ha entrado a negociar por "miedo escénico y vértigo político". A Iturgaiz le ha acusado de plantear "falsas expectativas", de tener "escasa altura de miras" y de negarse a negociar con "excusas banales".