Urkullu irrita a sus socios del PSE con su idea de reclamar otra vez un Poder Judicial vasco

La propuesta del lehendakari, Iñigo Urkullu, sobre la necesidad de activar la creación de un Poder Judicial vasco ha generado otra grieta entre los socios gubernamentales. Porque dicha idea ha irritado al PSE. No por casualidad este martes tanto el líder de los socialistas vascos, Eneko Andueza, como el delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, respondían en contra de esa posibilidad. 

Los tiras y aflojas entre el PNV y el PSE, socios en el Gobierno vasco, empiezan a formar parte del paisaje vasco. Son ya costumbre. Sobre todo, cuando lo que se debate guarda relación con el autogobierno. La última prueba tiene que ver con el Poder Judicial vasco que reclamaba Urkullu este lunes sin que nadie lo esperase. 

En puridad, Urkullu resucitaba una idea que ya defendió en el pasado, en el seno de lo que él llamaba "el Concierto Político vasco". 

Respuestas reveladoras

Tajante se mostró Andueza, que aprovechó una comparecencia en la sede del partido en Bilbao para recordar a Urkullu que "el Judicial es un poder del Estado, recogido en la Constitución; eso nada se puede añadir". A su juicio, los ciudadanos quieren oír al lehendakari hablando "de una mejor sanidad, de una mejor educación, de una mejor política industrial y, desde luego, de una respuesta adecuada a los retos" como el demográfico, el climático o el empleo de calidad.

"Los vascos nos quieren en esas cuestiones y en ellas está el PSE-EE; nosotros entendemos que esas son las verdaderas prioridades de la política actual", ha añadido. Un discurso que va en la línea de lo que él mismo decía este lunes, en un acto con que los socialistas vascos pusieron en valor el Estatuto de Gernika con motivo del 43º aniversario de su aprobación. 

En la misma línea, el delegado del Ejecutivo central en el País Vasco, Denis Itxaso, sostenía que abogar por un Poder Judicial propio para Euskadi en la actualidad "no tiene mucho sentido". Y recordaba a Urkullu que "las competencias y la soberanía están totalmente diseminadas, y nadie tiene, ni siquiera los Estados, todo el poder".