En un momento de crisis energética, con el reciente 'acelerón' de los proyectos de renovables en Euskadi y con un ciclo electoral a la vista, EH Bildu se prepara para dar una nueva batalla en este ámbito al PNV. La coalición abertzale, que hace unos días ya presentó un 'plan de bienestar' con propuestas como el fin de la política de dividendos, la subida del SMI a 1.400 euros o una subida del impuesto de sociedades, ha concluido un proceso de varios meses de análisis para elaborar una estrategia energética que presentará el próximo 26 de noviembre en Bilbao. El proyecto, capitaneado y presentado este miércoles en Bilbao por el parlamentario vasco Mikel Otero, será objeto de una conferencia en la que estarán presentes el propio Otero, Peio Igeregi y Arnaldo Otegi y que se celebrará en el Bizkaia Aretoa.

Sin que todavía hayan trascendido grandes detalles de en qué consistirá la propuesta de Bildu, Otero sí que ha dibujado tres grandes líneas maestras que conformarán la estrategia de la coalición en materia energética. Tres frentes en los que la coalición ya ha tomado alguna iniciativa. En primer lugar estará la eficiencia y el ahorro energético, un aspecto en el que la coalición ya ha logrado en la cámara de Vitoria agilizar los trámites mediante una iniciativa que permitirá reducir los plazos para instalar placas de autoconsumo al no tener que pedir licencia de obra. Personalidades vinculadas a la izquierda abertzale también han liderado desde la sociedad civil proyectos como las cooperativas energéticas, que en Álava han contado con el apoyo y el asesoramiento del exdiputado de Eusko Alkartasuna Rafael Larreina.

En segundo lugar está un acelerón en el abandono de combustibles fósiles. Algo que siempre ha estado presente entre las reivindicaciones abertzales y que Sortu ya ha puesto en el debate público con su asalto a la central nuclear de Lemoiz para desplegar carteles pidiendo una transición energética "justa" con el mítico logo del sol que simbolizó el 'Garoña, ez'. Bildu pedirá así acelerar las desinversiones en fósiles en un momento en el que la reforma fiscal que debe traer una fiscalidad verde con la que las haciendas vascas penalicen a quienes más contaminan está en 'stand-by' por las derivadas de la guerra en Ucrania.

Por último -y quizá lo más importante-, la coalición abertzale pedirá un despliegue "muy grande" pero "muy ordenado" de las energías renovables. "En todas sus posibilidades, tecnologías y escalas", ha asegurado Otero. Esos dos conceptos, el orden y el despliegue de todas las renovables, son los dos matices en los que está haciendo hincapié EH Bildu como pista de aterrizaje de su apoyo a proyectos eólicos como el de Statkraft, más dialogante y que ha ofrecido a los vecinos de los municipios de los parques beneficiarse de la energía generada por los parques eólicos. El movimiento, interpretado por muchos como un cambio de postura, ha generado un incómodo revés para la formación, que ha tenido que aguantar como movimientos sociales hasta ahora cercanos a la coalición protestan en puntos como Azpeitia por la implementación de parques eólicos... que se suma a las desafecciones entre los jóvenes que están optando por movimientos como Gazte Koordinadora Sozialista (GKS).

En esa complicada tesitura, la coalición está insistiendo en que haya un "control público" de la instalación de esas renovables y que se den en un marco de "planificación democrática y deliberativa", puntos que también formarán parte de la estrategia energética de la coalición abertzale. Antes de esta presentación, también en Bilbao y dos semanas antes, la coalición celebrará su gran manifestación política anual bajo el lema 'Euskal olatua geldiezina', ola vasca imparable.