Que después de las elecciones vascas el PSE, que previsiblemente será la tercera fuerza, obtenga la Lehendakaritza gracias a los votos de EH Bildu, que casi con toda seguridad será la segunda, es una opción que parece remota. Pero que no está descartada. O, al menos, el propio secretario general del PSE, Eneko Andueza, no la descartó este jueves cuando le preguntaron directamente por esa opción. 

El líder y candidato a lehendakari de los socialistas vascos no para de repetir desde hace meses, y así lo hizo en una reciente entrevista con este diario, que no hará lehendakari a un candidato de Bildu. Algo que estos días se afana en remarcar a raíz de la moción de censura de la formación abertzale y el PSN en el Ayuntamiento de Pamplona. 

El PSE asegura que no votará a un lehendakari de la coalición liderada por Arnaldo Otegi. ¿Y al revés? ¿Qué ocurriría si los abertzales decidieran respaldar al candidato socialista como presidente del Gobierno vasco para desalojar al PNV? Esa era la pregunta obligatoria que tarde o temprano iba a llegar. Este jueves se la formulaban durante una entrevista en EITB. Y la respuesta de Andueza fue que tendría que pensárselo. O sea, no descarta esa posibilidad. 

De Borgen a Maroto

Esta opción es conocida como el 'pacto Borgen', porque en la famosa ficción danesa la protagonista, la política Birgitte Nyborg, lograba gobernar pese a ser la tercera fuerza con la excusa de que la gente había votado por el cambio. Claro que en la serie los resultados eran mucho más apretados de los que dibuja el último Sociómetro del Gobierno vasco, que apunta a una victoria del PNV con 29 escaños, seguido de Bildu con 25 y del PSE con sólo 11. 

Con esos números, parece casi impensable que Bildu quiera 'regalar' sus votos al PSE con tal de arrebatar el poder al PNV. Claro que existe un precedente protagonizado precisamente por los abertzales: el 'marotazo'. Ocurrió en 2015 en el Ayuntamiento de Vitoria. Bildu, que era segunda fuerza, cedió sus votos al PNV, tercero en las urnas, sólo para echar de la Alcaldía a Javier Maroto, del PP, que había sido el más votado con una amplia ventaja. 

"No lo contemplo de momento"

Andueza respondía este jueves que tendría que pensarse una posibilidad así. Aunque, eso sí, por ser justos, dejó entrever que le parece harto compleja. En concreto, el líder del PSE dijo, según Europa Press, que "yo ese escenario de momento no lo contemplo, entre otras cosas, porque no creo que estén dispuestos a darnos sus votos, y en segundo lugar, porque lo importante no es quién, sino para qué".

"En cualquier caso -agregaba-, nunca firmaría un acuerdo de gobierno con EH Bildu, como no lo ha hecho hasta el momento el Partido Socialista". Aseguraba ser "una persona de palabra", que cumple lo que dice. Además, advertía que los socialistas no participarán "de ningún proyecto independentista" y cree que últimamente eso es "de lo único que habla" Otegi.

Después, en la misma entrevista de la radiotelevisión pública vasca, le preguntaban por si dentro de unos años también rechazaría gobernar con EH Bildu. Al respecto, afirmaba que "nadie sabe en un futuro qué va a pasar y nadie puede descartar nada, porque lógicamente todos los partidos evolucionamos, damos pasos, y yo espero y deseo que en algún momento también EH Bildu dé un paso que creo que el conjunto de la sociedad vasca está esperando, que es el de condenar la violencia y el reconocer el daño causado". 

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