Erkoreka concluye su paso por el Gobierno con los sindicatos de la Ertzaintza todavía en pie de guerra

El consejero de Seguridad y vicelehendakari, Josu Erkoreka (Bermeo, 1960), es, junto con la consejera de Sostenibilidad, Desarrollo Económico y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, el único miembro del Ejecutivo vasco que se ha mantenido en el equipo de Iñigo Urkullu, desde que este fuera nombrado lehendakari en 2012 y comenzara la primera de sus tres legislaturas consecutivas. 

Sin ninguna duda, Erkoreka, que antes (2000 -2012) pasó por el Congreso de los Diputados, es uno de los hombres de mayor confianza de Urkullu. Su mano derecha dentro del propio Ejecutivo. Y precisamente por eso, es lógico que el actual vicelehendakari siga los pasos de quien le trajo al Gobierno vasco y, tras 12 años en el Parlamento, vaya a abandonar la Cámara Autonómica y dar paso así a una nueva camada de políticos jeltzales. Entre ellos, el sucesor de Urkullu, el nuevo candidato de la formación jeltzale, Imanol Pradales. 

En estas tres legislaturas, Erkoreka ha pasado por tres consejerías diferentes. Primero fue consejero de Administración Pública y Justicia y portavoz del Gobierno vasco; después pasó por la consejería de Gobernanza Pública y Autogobierno; y finalmente en esta última etapa fue nombrado vicelehendakari y consejero de Seguridad. Cargo con el que se despedirá de la Cámara vasca y que en los últimos meses le ha provocado grandes quebraderos de cabeza. 

Especialmente por el conflicto laboral que actualmente mantiene con los sindicatos de la Ertzaintza. Una disputa que parece estar bloqueada y que, de no solucionarse antes de las elecciones vascas, quedará como uno de los grandes manchones en la trayectoria reciente del consejero. De hecho, la próxima semana, el sindicato Euspel y el colectivo asindical 'Ertzainas en Lucha' han convocado varias movilizaciones en Bilbao para la próxima semana, que se alargarán desde el lunes 18 al viernes 22.

La unidad sindical de la Ertzaintza durante una manifestación / Cedida

Estas protestas consistirán en caravanas de vehículos que en otras ocasiones ya han colapsado los accesos de la capital vizcaína y cuyo formato Erkoreka ha denunciado en varias ocasiones. La última, el pasado jueves, cuando el consejero aseguró en Bizkaia Irratia que el resto de sindicatos de la Ertzaintza (Erne, Esan y Sipe) no estaban a favor de esta movilización porque "repercutirá negativamente en la imagen" de este cuerpo de policía. 

Descontento general

Este conflicto se remonta a hace ya varios meses. Los sindicatos de este cuerpo policial reclaman al departamento de Seguridad y al Gobierno vasco que aumente la inversión en el material que usan los agentes y la formación que estos reciben. Pero sobre todo, piden la reforma de un convenio que lleva más de una década sin actualizarse, y un aumento salarial que el consejero ve imposible de llevar a cabo. 

Pero aunque la llamada unidad sindical de la Ertzaintza, formada por Erne, Esan y Sipe, se ha reunido en numerosas ocasiones con el departamento de Erkoreka, el consejero solo ha participado en una reunión. Por esto, cansados de que el Gobierno vasco no atendiera las peticiones que, a juicio de estos sindicatos, eran indispensables, estos comenzaron una ronda de contactos con el resto de partidos políticos. Unas reuniones que finalmente, a propuesta del PP, les llevaron a participar en una comisión del Parlamento vasco. 

Toda esta situación, que a día de hoy no parece estar cerca de solucionarse, está a punto de dejar una mancha en la trayectoria de Erkoreka. Este, dejará a su futuro sucesor una gran brecha con los sindicatos del principal cuerpo de seguridad de Euskadi. Un sector en el que además, la gran mayoría de los agentes son partícipes de estos sindicatos, y por tanto, las quejas y exigencias que estos transmiten, representan la opinión de buena parte del cuerpo.