La era post-Totorika azota al PSE-EE por primera vez con el 'sorpasso' de EH Bildu en Ermua

Las elecciones vascas dejaron una noche llena de reflexiones y de claves que decantaron el posible pacto entre PNV y PSE-EE para que Imanol Pradales sea, en las próximas fechas, el nuevo lehendakari para los próximos cuatro años. Varios municipios dejaron a un lado una fidelidad por una formación muy integrada en el día a día de sus ciudadanos para optar por otra vía que pocas veces se ha visto en algunas casos. Uno de ellos, es Ermua. El municipio vizcaíno, el único que apostó por el PSE-EE en las elecciones del año 2020, agrietó su vínculo socialista con los últimos resultados, donde EH Bildu fue la formación más votada, por delante de la que lidera Eneko Andueza. Fueron más de 500 papeletas de diferencia.

Si bien es cierto que es una de las pocas localidades donde el PSOE finalizó como segunda fuerza, la distancia con el EAJ-PNV, tercero, fue mínima y se decantó por 47 votos. De cumplirse un 'sorpasso' de los jeltzales, hubiera supuesto el peor resultado de los socialistas en unas elecciones vascas en Ermua. Y es que se trata de un territorio muy ligado al socialismo desde las primeras elecciones autonómicas de 1980, año en el que, meses antes, se aprobó el Estatuto de Gernika. Por aquel entonces, Ermua ya se encontraba ligada al partido de Andueza, con Julián Sancristóbal como alcalde. El que fuera Director de la Seguridad del Estado durante el gobierno de Felipe González entre 1984 y 1986, marcó un camino que, a día de hoy, continúa trazando la misma ruta.

Carlos Totorika fue alcalde de Ermua desde 1991 hasta 2018, repartidas en siete legislaturas Europa Press

Tras su adiós, Antonio Cortizo y Francisco Berjón fueron los que dieron continuidad a la entrada del socialismo dentro de la localidad hasta la llegada de Carlos Totorika. El vizcaíno, durante 27 años consecutivos, fue alcalde de su ciudad natal y el que permitió que el PSE-EE contara con su primera gran fuerza en unas elecciones vascas. De hecho, hasta el año 2001, los socialistas fueron el partido más votado en seis ocasiones de manera consecutiva. La muerte del concejal del Partido Popular, Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA en 1997, cambió la perspectiva de los ciudadanos y fueron los celestes los primeros en 'desbancar' al PSE-EE del primer lugar en unas elecciones autonómicas (27,57% el primero y 24,34% el segundo).

En las elecciones del año 2009, el PSE-EE fue el más elegido en Ermua con casi la mitad de los votos: 3.888 de 8.845 (46%)

La buena gestión de Totorika al frente del Ayuntamiento de Ermua y las mejoras en la localidad, con cambios positivos en la vivienda, el bajo porcentaje de desempleo y la cercanía con sus ciudadanos, le permitió al socialismo recuperar a su bastión durante las grandes citas electorales, tanto autonómicas como municipales. Esto permitió que el PSE-EE fuera, durante tres ocasiones consecutivas más, la formación más votadas, con resultados muy abultados respecto a los otros partidos que se presentaban: en 2005, venció con casi un 36% de los votos; en 2009, con un 46% y en 2012, en cambio, con otro 36%.

Dominio 'decrescendo'

La llegada de Podemos cambió por completo la hoja de ruta y, en 2016, los socialistas se vieron perjudicados y superados por el PNV. Dos años después, Totorika, entre lágrimas, se despidió de la política y dejó su legado a Juan Carlos Abascal. Con el de Bizkaia, también nacido en Ermua, el PSE-EE continúa hacia adelante en las elecciones municipales, pero su poderío en las autonómicas ha decrecido de tal manera que, en 2020, tan sólo pudo superar a los jeltzales por 110 votos. El margen más estrecho teniendo en cuenta los triunfos del partido de Andueza. Hace escasos días, desde la formación confiaban en contar con su primera fuerza, la que le llevaría a igualar o superar los registros obtenidos la última vez.

EH Bildu, de forma sorpresiva, adelantó al PSE-EE de manera clara y con una diferencia superior a las 500 papeletas

EH Bildu, de forma sorpresiva, adelantó al PSE-EE de manera clara y con una diferencia superior a las 500 papeletas. Un sabor agrio para un Eneko Andueza que, aún y todo, supo contrarrestar este golpe con el aumento de escaños en las elecciones generales. "Aún y todo, los votos en Ermua han subido respecto a las elecciones del 2020", defendían desde el partido. Y es cierto, obtuvo 362 votos más, pero con 1.500 participantes más.

Otxandiano, durante la charla del 21-A. Efe