Acto de Sortu / Sortu

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Política

El Ministerio de Cultura explica por qué concede subvenciones a la Fundación Iratzar, afín a Bildu

El departamento que dirige Ernest Urtasun despeja las dudas sobre la legalidad de las ayudas al colectivo que acoge a históricos dirigentes de la izquierda abertzale como Permach o Aoiz 

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Son cantidades económicas ínfimas. Varios miles de euros en los últimos cuatro años. Pero el Ministerio de Cultura que dirige Ernest Urtasun ha querido despejar cualquier duda en torno a la legalidad de ayudas a la Fundación Iratzar, vinculada a Sortu, partido que lidera EH Bildu. 

Se trata de una fundación con un polémico pasado por dar cobijo a etarras como ‘Kubati’. Y ahora Cultura aclara que tiene derecho y cumple con la ley, al igual que FAES u otras fundaciones políticas, para recibir subvenciones de dinero público del Estado.

El Ministerio ha aclarado así las dudas legales planteadas, a finales de mayo, por el diputado de Vox, Francisco José Alcaraz, quien fuera expresidente de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) entre 2004 y 2008. 

En una batería de preguntas parlamentarias dirigidas al Gobierno, Alcaraz puso en cuestión los criterios para que la Fundación Iratzar, “vinculada a Sortu y ETA”, recibiera subvenciones del departamento de Cultura.

Alcaraz quería saber por ello “qué requisitos cumple la fundación Iratzar para recibir los mencionados subvenciones” y si “tiene el gobierno la certeza de que ningún miembro de ETA con delitos de sangre a sus espaldas forma parte de la mencionada fundación y se beneficia en consecuencia del dinero público cedido por el Ministerio de Cultura”.

Cantidades

Las cantidades aportada por el departamento de Urtasun son muy pequeñas. Según aparece publicado en el portal online del sistema nacional de publicidad de subvenciones y ayudas públicas, la fundación Iratzar ha recibido diversas subvenciones durante los últimos años. En concreto, 4.427,56 euros en 2021; 3.099,29 euros en 2022; 3.683,73 euros en 2023 y 3.683,74 euros en 2024.

El Gobierno no entra en el fondo de la cuestión ni valora los posibles vínculos que Iritzar mantenga con antiguos miembros de ETA.

La explicación

Cultura ha reconocido esta semana que ha concedido subvenciones por un total de 350.000 euros para financiar los gastos de funcionamiento de fundaciones y asociaciones vinculadas a los partidos políticos con representación en las Cortes Generales.

En este marco, la Fundación Iratzar, vinculada a la federación de partidos Euskal Herria Bildu (EH Bildu), “cumple este extremo” en función de la representación obtenida en las Elecciones Generales de 2023.

“La Fundación Iratzar presentó su solicitud de acuerdo con el artículo 2.2 del Real Decreto, cumpliendo con los requisitos para ser entidad beneficiaria siguiendo el artículo 3”, explica el Ministerio. 

“Según lo dispuesto en el artículo 3 de la norma, se ha verificado que la Fundación Iratzar, al igual que el resto de beneficiarias, cumple con los requisitos legales, incluida la inscripción en la sección específica del Registro de Partidos Políticos prevista en la Ley Orgánica 6/2002, de 27 de junio”.

Estas ayudas, que se convocan desde 2017, tienen como objetivo apoyar actividades de estudio y desarrollo del pensamiento político, social y cultural, dirigidas de manera general a la ciudadanía.

Entre las acciones subvencionables se incluyen programas de investigación, cursos, seminarios, conferencias, actividades de formación, exposiciones, congresos, reuniones, publicaciones y creación de centros de documentación.

Batasuna y ETA

La Fundación Iratzar ha estado bajo el radar de Vox y de los colectivos de víctimas de ETA por haber dado trabajo a miembros de ETA en el pasado.

El diario 'El Mundo' publicó en 2014 que el etarra José Antonio Ruiz, alias ‘Kubati’, uno de los asesinos de Yoyes y responsable en total de 13 asesinatos, trabajaba para esta Fundación abertzale.

Y en 2019, el mismo periódico destacó que el hijo del histórico etarra Josu Ternera, Egoitz Urrutikoetxea, también trabajaba para la Fundación Iratzar escribiendo artículos para su revista Erria. 

Ahora mismo, esta fundación acoge a históricos dirigentes de la izquierda abertzale tradicional. Preside la misma Floren Aoiz y trabaja a su lado Joseba Permach, ambos miembros destacados de HB. Y con ellos trabaja Elena Beloki, condenada por pertenencia a ETA.