Desde 2020, trece grandes empresas - que hubiesen sumado 6 millones de metros cuadrados en propiedad- se han interesado por instalarse en Álava, concretamente en el parque tecnológico de Miñano. Aunque finalmente solo dos pudieron hacerlo, por la falta de suelo industrial en la capital vasca, este dato refleja el atractivo que tiene este territorio a la hora de captar empresas.
Gracias a la implantación y posterior papel tractor de importantes compañías de calado internacional, entre ellas Mercedes y Michelin, el peso industrial del territorio ha crecido considerablemente en los últimos años, posicionando especialmente a la capital como foco de riqueza y empleo en Euskadi . En Vitoria, según los últimos datos, se producen más de 9.000 millones de euros anualmente, haciendo que esta suponga un 11,5% del PIB industrial vasco; cifra que aumenta hasta el 32% recogiendo la totalidad del territorio alavés.
Este es ya proporcionalmente el territorio más industrial de todo el Estado. Peso industrial que es el que ha posicionado a Álava a la cabeza de salarios -con un salario medio por habitante de 2.547 euros según los últimos datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones-, exportación -los datos de Álava del último año superaron por primera vez a los de Gipuzkoa- y renta per cápita, entre otros indicadores del bienestar económico.
“Sin duda tenemos un importante músculo industrial, estamos en una situación estratégica desde el punto de vista logístico y hemos contado hasta la fecha, aunque cada vez va a ser más complicado, con personal cualificado y una buena calidad de vida”, aseguran desde SEA, la patronal alavesa; aunque avisan: “Los demás no están quietos y cada vez tenemos más territorios que compiten con nosotros por la atracción de proyectos empresariales”.
La ubicación, un elemento clave
Si bien han surgido, en los últimos años años claros territorios competidores, Álava sigue siendo foco de atractivo para muchas compañías de talla internacional, en especial por su ubicación geográfica, en el cruce del eje transeuropeo Madrid-París con el eje ibérico Barcelona-Oporto.
Ubicación que ha sido explotada, especialmente en Vitoria, por las instituciones con la construcción de importantes plataformas logísticas y polígonos industriales como el aeropuerto internacional de carga de Foronda, Arasur o el CVT, la conexión intermodal ferrocarril-ciudad del transporte, una importante y extensa red ferroviaria y de autovías transeuropeas -reforzada con el nodo logístico de Jundiz-, y su proximidad a los puertos de Bilbao, Pasajes y Santander, el primero de ellos a menos de una hora de la capital vasca.
Tecnología e innovación como foco de atractivo
El Parque Tecnológico de Miñano, ya no en Vitoria pero sí muy próximo a la capital vasca, ha conseguido reunir desde que fue inaugurado en 1992 numerosas compañías líderes en el sector tecnológico y de la innovación y posicionarse así como uno de los grandes focos de atractivo para la llegada de empresas de este sector.
El parque, que forma parte de una red de 9 campus distribuidos en Euskadi, aloja además de importantes compañías, centros tecnológicos y de investigación y numerosas unidades de I+D de prestigio internacional que no solo desarrollan la labor investigativa, sino que también actúan como agentes de transferencia tecnológica, ofreciendo a las propias empresas instaladas en el parque diferentes servicios.
Si bien Miñano es el buque insignia de Álava en el ámbito innovador, son otras las empresas que han empezado a desarrollar, de manera eficiente y rápida, su carácter más innovador, la mayoría de ellas dirigidas hacia una producción más sostenible.
El ejemplo más claro en la planta con más trabajadores de Euskadi, Mercedes y su ampliación -de más de 1.000 millones de euros- para conseguir una fábrica “flexible, sostenible y altamente tecnológica para poder abordar la producción del VS20 de combustión y la VAN.EA eléctrico”. A esto se le suma la producción que arrancará en julio de las nuevas E.Vito y su objetivo de haber reducido en 2030 un 80% las emisiones de CO2, después de lograr, en 2022, ser una planta neutra en carbono.
Ayudas para las empresas y fiscalidad
En esta línea, y como llamamiento para las empresas que destaquen por su carácter innovador, la diputada de Desarrollo Económico e Innovación de la Diputación Foral de Álava, Saray Zarate, ya ha asegurado su apuesta por este ámbito en Euskadi los próximos años. Con ayudas como Innova Digitaliza, con dos millones de euros, las ayudas de apoyo a la creación de nuevas estructuras empresariales, las de creación de microempresas, el programa Ekintzaile, Gauzatu Industria, Neotec o Nets, entre otros, la Diputación pretende captar talento y asentarlo en el territorio.
Pero las ayudas no son las únicas facilidades que el territorio da a las empresas en sentido económico, y es que según recoge el Índice Autonómico de Competitividad Fiscal que elaboran los think tanks Fundación para el Avance de la Libertad y Tax Foundation estadounidense -que analiza la evolución en cada territorio del IRPF, Patrimonio, Sucesiones, Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados y tributos propios- Álava es ya la provincia de Euskadi más atractiva fiscalmente, desbancando así a Bizkaia, que llevaba años ocupando esa posición, y localizándose en segundo lugar del total de territorios de España, solo por detrás de Madrid.
Álava alcanza el segundo puesto en 2023 por la minoración de la cuota de hasta 200 euros para contribuyentes con una base liquidable inferior a 35.000 euros, así como por la deducción complementaria por hijo. Medidas que, dadas las similitudes que mantienen Álava, Bizkaia y Gipuzkoa a nivel tributario, permiten al primero destacar ligeramente sobre los otros dos. De hecho, si se analiza únicamente el IRPF, la figura de mayor alcance social y recaudatorio, el territorio gobernado por Ramiro González se alza con la primera posición de España incluso por delante de Madrid, que cae en este apartado al cuarto puesto.