Denis Itxaso: "Tenemos que debatir con honestidad sobre los 20 años de vigencia de la Ley del Suelo"
- El consejero de Vivienda del Gobierno vasco habla con Crónica Vasca sobre los retos que tiene por delante
- Más información: La vivienda ya es la segunda preocupación más importante para los vascos
Esta semana trascendía que la vivienda es ya el segundo problema para la ciudadanía de Euskadi. Y se confirmaba que los precios de comprar o alquilar inmuebles siguen al alza. En ese difícil contexto, el consejero de Vivienda del Gobierno vasco, Denis Itxaso (San Sebastián, 1975), recibe a Crónica Vasca en su despacho con lógica preocupación pero también con ganas de intentar revertir la situación con multitud de políticas.
El exdelegado del Gobierno habla con pasión y con datos de un tema que no es sencillo y que presenta numerosas aristas. De las zonas tensionadas a la necesidad de liberar suelo pasando por las viviendas de protección oficial. Retos nada sencillos para una legislatura que sólo acaba de empezar.
Esta semana hemos conocido en el Sociómetro que la vivienda es ya el segundo problema para los vascos. ¿Cómo recibió ese dato como responsable del tema en el Gobierno vasco?
No por esperado deja de ser un elemento más de preocupación. Somos perfectamente conscientes de la situación por la que está atravesando, no ya las clases más vulnerables, sino diría el conjunto de la clase media y así lo atestiguan nuestros datos del Observatorio Vasco de la Vivienda. Esto tiene que ver con el embargo de las rentas, es decir, los salarios están cada vez más comprometidos para el pago del coste de la vivienda, sea esta a través de los alquileres o través de las hipotecas.
Este es un problema social de equidad, pero también es un problema económico. Supone un desafío al que tenemos que hacer frente, sin lugar a dudas, colaborando las diferentes instituciones y también mediante la colaboración público-privada porque solos no vamos a poder.
También hemos conocido que el precio de compra de la vivienda sigue al alza y es uno de los más caros de España. ¿Qué medidas hay que tomar para remediar esto? ¿Liberar suelo es la solución?
Hay que movilizar suelo. En Euskadi, en estos momentos, nosotros calculamos que hay suelo como para construir 75.000 viviendas protegidas en manos públicas y en manos privadas. Hemos detectado que hay una parálisis de la construcción por múltiples factores que estamos analizando. Lo que suelo decir en estos casos es que los tiempos del urbanismo y la vivienda no son los tiempos de las familias. Entre que modificamos las leyes, adoptamos nuevos decretos, llegamos a acuerdos con promotoras y con ayuntamientos, pasa un tiempo. El proceso de maduración de una vivienda desde que se fabrica el suelo hasta que se entregan las llaves es de, como mínimo, cinco años.
Por eso, la Ley de Vivienda permite, en aquellos lugares donde hay un tensionamiento excesivo del mercado residencial, topar los incrementos para que ese tiempo que necesitamos para reanudar la marcha y para, de alguna manera, recuperar un ritmo razonable de construcción de nueva vivienda, sea un tiempo de protección de los inquilinos.
Euskadi es la segunda comunidad autónoma con mayor promoción de vivienda protegida. Usted se ha comprometido a incrementar en un 40% la oferta de VPO con respecto a la pasada legislatura. ¿Qué medidas va a poner en marcha para lograrlo?
La primera ya la hemos adoptado en el seno del Consejo de Administración de Visesa. Hemos hecho un encargo ya aprobado en el Consejo y validado en los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma Vasca de recrecer en un 50% el inicio de nuevas obras de cara al 2025. Todos los años, Visesa arranca con 500 nuevas viviendas que tienen sus respectivos plurianuales y, a partir del año que viene, va a empezar a construir 750.
Además, nos dotamos de mayor presupuesto en el departamento para construcción de mayor número de alojamientos dotacionales en rotación para jóvenes menores de 36 años, estamos alcanzando nuevos convenios con ayuntamientos para captar suelos y poder construir más viviendas, así como actualizamos los umbrales para el acceso a las ayudas.
El de la vivienda, es un problema de equidad, pero también económico
Los estudios hablan de que Euskadi necesita más de 100.000 pisos para satisfacer la demanda que existe. ¿Tienen previsto ayudar a las constructoras de alguna forma para que construyan más viviendas libres?
Una herramienta que nosotros tenemos es el Pacto Social por la Vivienda, donde también está el sector privado, entre ellas, las constructoras. Efectivamente, necesitamos al sector privado para poder cumplir todos esos objetivos.
Para ello, creemos que hay que flexibilizar los umbrales actuales de la Ley del Suelo y, en este sentido, el Foro Social por la Vivienda y el Urbanismo, que vamos a constituir en Consejo de Gobierno para finales de año, queremos que se estrene con un debate sobre el desempeño y el resultado que ha dado en estos 20 años de vigencia la Ley del Suelo vasca, que se aprobó en 2006. Queremos que ese foro, donde están representados todos los intereses públicos y privados, puedan hacer ese análisis honesto, sincero y riguroso y, a partir de ahí, habrá una reflexión sobre si necesitamos cambiarla o no.
Por otro lado, está toda la cuestión que tiene que ver con los trámites y la burocracia. Este es un problema del que el Gobierno vasco viene advirtiendo, pero que en el urbanismo es atroz. En ocasiones, te vuelven a pedir un montón de procedimientos que ya están acreditados y eso eterniza el proceso de maduración de la vivienda. En Euskadi somos garantistas y, desde luego, hay que serlo, pero lo que no podemos es tener estructuras que sean paralizantes.
En los Presupuestos se incluye que el programa Gaztelagun aumentará su dotación un 47% hasta alcanzar los 25 millones de euros. De esta forma, los beneficiarios pasarán de 7.000 a 8.500. ¿Es esto suficiente para todos los jóvenes que necesitan una vivienda?
Parto de la base de que nunca es suficiente, ninguna de las políticas por sí mismas resuelven el problema de forma integral. En el caso de Gaztelagun, afronta un desafío muy concreto en menos de 36 años en su derecho a la emancipación y se les ayuda con esa con esa prestación. Creo que es interesante abrir el abanico para que un universo mayor pueda acceder elevando los umbrales hasta los 30.000 euros de ingresos que esto cómo lo vamos a como lo vamos a situar ahora con la reforma, pero también hacerlo alineado con las zonas tensionadas.
La zona tensionada, además de proteger a los inquilinos en un momento determinado, es una herramienta que nosotros podemos emplear para poder, en un momento dado, ayudar a los jóvenes sin miedo a que eso recrezca el precio el precio del alquiler porque estarán topados.
Queremos que el Foro Social por la Vivienda y el Urbanismo se estrene con un debate sobre el desempeño y el resultado que ha dado en estos 20 años de vigencia la Ley del Suelo vasca
Usted ha dicho que hay 46.000 pisos vacíos en Euskadi. ¿Cómo van a legislar para movilizar toda esa vivienda? ¿Rehabilitar es la solución?
Sí, los hay y van bajando. Es el porcentaje más pequeño de pisos vacíos respecto a nuestro parque de vivienda de primera residencia y aun así nos preocupa y queremos reducirlas al mínimo. Dicho esto, solo 25.000 de ellas están en lugares donde hay demanda, es decir, cuando uno caracteriza bien esas viviendas, se da cuenta de que tampoco todas esas ellas nos van a sacar de pobre y para nosotros es importante que esas viviendas salgan al mercado.
¿Cuál es nuestra estrategia? Primero, la zanahoria: todo tipo de ventajas para los propietarios, hasta un 50% de desgravación total, pero es que también se recrecen los incentivos fiscales para quienes lo pongan en el mercado el alquiler privado, hasta un 30%.
Todo tipo de ventajas para los propietarios, hasta un 50% de desgravación total, que no computa en términos fiscales si tu piso lo pones en Alokabide para el programa Bizigune. Pero también se recrecen los incentivos fiscales para quienes lo pongan en el mercado el alquiler privado, hasta un 30% si no me equivoco.
Creo que eso es un incentivo interesante. Además nosotros vamos a tratar de mejorar las condiciones de Bizigune intentando mejorar el canon también cuando se declaren zonas tensionadas y las posibilidades de incremento de los alquileres están topadas.
Hasta ahí la zanahoria, ahora el palo...
El palo tiene que venir en la aplicación consecuente de ese principio constitucional que es el derecho de acceso a la vivienda y el derecho subjetivo que de ahí emana en la ley vasca. Si estamos de acuerdo en eso y en que la vivienda debe cumplir una función social, deberemos también hacer entender a los propietarios que si pese a todas las ventajas y todos los incentivos que ponemos sobre la mesa alguien persiste en mantener vacía y en desuso su vivienda, entonces deberá pagar unos impuestos.
Estamos hablando con los ayuntamientos para que apliquen el canon de vivienda deshabitada. Al margen de si están aplicando el recargo del IBI, consideramos que el decreto de vivienda deshabitada al Gobierno vasco da suficiente garantía y seguridad a los ayuntamientos para que puedan aplicar ese canon
¿Y algo más?
Nosotros estamos hablando con los ayuntamientos para que apliquen el canon de vivienda deshabitada. Al margen de si están aplicando el recargo del IBI, consideramos que el decreto de vivienda deshabitada al Gobierno vasco da suficiente garantía y seguridad a los ayuntamientos para que puedan aplicar ese canon y de alguna manera desincentivar que eso se siga produciendo.
Yo tengo más confianza en las políticas de zanahoria, porque son las que están permitiendo que siga reduciéndose el parque de vivienda deshabitada. Las últimas encuestas de esta misma semana y los datos que hemos dado a conocer al Parlamento la semana pasada atestiguan que el parque de alquiler libre sigue creciendo.
¿Crece pero de forma lenta?
Es verdad que en el último año la velocidad de crecimiento se ha atemperado, pero sigue creciendo, no se está reduciendo. Pese a todos aquellos que nos amenazan con las siete plagas y que hablan de que el mero hecho de haber anunciado la aplicación de las zonas tensionadas o que se haya aprobado la ley pudiera estar ahuyentando a los propietarios de colocar su piso en el mercado del alquiler, eso es falso.
Y ante los prejuicios simplemente decir que países tan bolivarianos como el Estado francés están aplicando políticas muy similares de tope a los alquileres en ciudades muy conocidas para nosotros como Biarritz, Anglet, San Juan de Luz o Bayona. Lo están haciendo incluso por alguna medida hasta más confiscatoria que lo que pueda representar la ley española.
Aquí hay una máxima, que es proteger a los inquilinos y proteger a la ciudadanía de un derecho que en estos momentos está en tela de juicio, que es a tener un techo en el que vivir y del que se desprenden otros muchos derechos que si no se cumple aquel primero no se van a poder desarrollar.
Hablando de las zonas tensionadas, todavía no conocemos cuáles serán los precios de referencia de los alquileres de estas zonas. ¿Cómo va este asunto o cuándo lo conoceremos?
Me encantaría poderle dar alguna información, pero esa es una cuestión que están trabajando las diputaciones las haciendas forales, en concreto con el Ministerio. Yo he hecho todo mi papel de mediación para engrasar las relaciones y hacer entender lo importante que es poder transmitir esos datos lo antes posible.
Me tranquiliza que están trabajando así como que hay problemas de carácter más tecnológico de transmisión y de privacidad de los datos en torno a su uso. Además, en la reforma fiscal las diputaciones establecen la zona tensionada con un criterio luego por tanto eso ya denota que hay una voluntad.
¿En qué sentido?
No tendría sentido establecer una reforma fiscal donde tú pones como criterio la zona tensionada y que luego no existan los precios de referencia, que son el elemento indispensable sin el cual no se pueden limitar los alquileres.
Ahora mismo creo que Gipuzkoa va a una velocidad mayor. Aunque está Galdakao, que también nos lo ha pedido hace un tiempo, fundamentalmente San Sebastián, Irún, Errenteria y Lasarte son municipios que es importante que estén preparados para la aprobación del índice de precios.
Nosotros queremos el recrecimiento de la oferta, sobre la base de un principio: declarar una zona tensionada no es una buena noticia. Es el reconocimiento de un problema grave y tampoco puede ser la vocación de un ayuntamiento declararse la tensión a su municipio sine die
¿Por qué hay tan pocos pueblos que ya son zona tensionada si hay 43 que cumplen las condiciones?
Porque a pesar de todo nuestro acompañamiento a los ayuntamientos para orientarles sobre la mejor manera de hacerlo, muchas veces tardan. Los ayuntamientos tienen que cumplir dos requisitos: que el coste medio de la renta supere el 30% de los ingresos familiares y que el precio de compra o alquiler haya subido en los últimos cinco años tres puntos porcentuales por encima del IPC de la CAPV.
Nosotros queremos el recrecimiento de la oferta, sobre la base de un principio: declarar una zona tensionada no es una buena noticia. Es el reconocimiento de un problema grave y tampoco puede ser la vocación de un ayuntamiento declararse la tensión a su municipio sine die. No tiene sentido desde el punto de vista de un mercado sano que asumamos que el tensionamiento se va a prolongar indefinidamente. El objetivo debe ser salir cuanto antes.
Como sabemos que eso no es de un día para otro porque depende fundamentalmente de que haya más oferta porque la demanda no va a bajar, necesitamos que ese tiempo los ayuntamientos establezcan planes. Que nos digan dónde están y cuáles son los suelos que nos van a ceder para que nosotros les ayudemos a construir vivienda, cuáles van a ser las modificaciones de ordenanzas municipales a las que van a abordar, por ejemplo para la conversión de locales comerciales en viviendas, etcétera.
Siguiendo con las zonas tensionadas, hablaba usted de los prejuicios que existen y además algunos expertos opinan que controlar el precio del alquiler puede tener efectos negativos...
He estado en Cataluña recientemente. Allí hemos tenido reuniones con el alcalde de Barcelona y con la consellera de Territorio y Vivienda. Ellos van por delante porque son la primera comunidad autónoma que declaró una primera tanda de 140 y una segunda de otros tantos. Lo que están observando es que los precios se han moderado incluso han bajado en algunos sitios. A nosotros eso nos parece esperanzador y por más que hay otro dato del que los más digamos pesimistas o agoreros se están haciendo eco,
El número de viviendas que están bajo el régimen del alquiler libre sigue creciendo y fundamentalmente viene de la bolsa de viviendas vacías que cada vez es más pequeña. Cuando alguien me dice 'ya, pero esa velocidad cada vez es menor', pienso que sí, claro, y lo va a seguir siendo porque llega un momento en que tú te topas con el parque de vivienda de primera residencia.
Esta pregunta no sé si es para usted o para su compañero de partido y de gobierno, el señor Hurtado, o para los dos. ¿Qué hacemos con el boom de los pisos turísticos sobre todo en algunos lugares de Euskadi?
Trabajar como viene trabajando el Gobierno vasco, con absoluta diligencia y responsabilidad social. Yo siempre me precio de tener un compañero en el Consejo de Gobierno como Javier Hurtado, que desde luego defiende la competitividad turística, defiende el sector y su dinamismo, pero tiene claro que no tiene que ser a costa de una proliferación ilimitada y desmedida de los pisos turísticos.
Porque hay un programa de gobierno y hay una filosofía también en el seno del Partido Socialista: para nosotros es una premisa que los pisos fundamentalmente deben de servir para la función social para la que fueron concebidos, que es para vivir. Por tanto, tenemos desde la primera hora en el que este fenómeno tomó fuerza un registro de pisos turísticos en Euskadi.
¿Es eso suficiente?
Ese registro lo estamos contrastando en permanentemente con los ayuntamientos. Y que además lleva asociado un cuerpo de inspectores para vigilar que no se comercialicen pisos que no estén recogidos en ese registro. Además, en Euskadi los ayuntamientos, que tienen la competencia en esta materia, están reconociendo y asumiendo el problema que tiene esto en su parque residencial. Y están vía ordenanzas o vía normativas urbanísticas frenando cuando no suspendiendo el otorgamiento de nuevas licencias.
Cuando tú viajas a Nueva York, tienes diferentes modalidades, pero no la de los pisos turísticos. Es para hacérselo mirar aquí
Por ello, creo que en Euskadi ese es un fenómeno que está muy medido y relativamente controlado. Y lo va a estar más con las medidas del Ministerio de Vivienda como consecuencia de la directiva europea que establece un registro único para toda Europa, donde los pisos, sean para un uso residencial o de cualquier otro tipo, están referenciados y por tanto se les puede hacer un seguimiento mucho más certero del uso que se está dando.
Yo solamente les quiero decir que hace muchos años Nueva York decidió que no eran legales los pisos turísticos. Cuando tú viajas a Nueva York, tienes diferentes modalidades, pero no la de los pisos turísticos. Es para hacérselo mirar aquí.
Para terminar con este bloque, ¿cómo convive usted con el PNV teniendo en cuenta que recurrió la Ley de Vivienda estatal ante el Constitucional?
Lo tengo más fácil que mi antecesor Iñaki Arriola en la anterior legislatura, en la que se produjeron estos hechos. A día de hoy ha habido unas elecciones de por medio y ha habido un reforzamiento de las posiciones del Partido Socialista. Como consecuencia de todo ello hay un pacto de gobierno que establece que con la Ley de Vivienda estaremos a lo que diga el Constitucional, claro, pero en cualquier caso en ese programa ya se incorpora la figura de las zonas tensionadas, que ahora mismo las estamos declarando en ayuntamientos liderados por el PSE, por el PNV o por Bildu.
Quiero hacer un alegato en favor de un país como Euskadi que está trabajando y remando en la misma dirección pese a las diferencias ideológicas, que por supuesto las hay. Hay que prestigiar los acuerdos entre diferentes
Por tanto, quiero hacer un alegato en favor de un país como Euskadi que está trabajando y remando en la misma dirección pese a las diferencias ideológicas, que por supuesto las hay. Hay que prestigiar los acuerdos entre diferentes. Así, tengo una posición de tranquilidad al respecto y no tengo ningún problema en el Consejo de Gobierno ni con el lehendakari en esta materia, al menos hasta la fecha.