El pacto educativo vasco excluye a los colegios del Opus Dei

Enterrar la "concertación universal". Ese es uno de los objetivos con los que Elkarrekin Podemos ha cerrado un preacuerdo con los partidos del Gobierno para la nueva ley educativa. El nuevo texto, salvo sorpresa en los dos días que quedan para enmendarlo, incluirá un catálogo de "exigencias concretas" para aprobar los conciertos a la educación privada. Muchas de esas exigencias son poco tangibles -transparencia, equidad, diversidad social o atención al alumnado más vulnerable-, pero hay uno que no puede ser más concreto: el de la segregación por sexos. Una 'rara avis' en la escuela pública vasca que solo mantienen seis centros vinculados al Opus Dei: los colegios Arangoya (Bilbao) Gaztelueta (Leioa)  Ayalde (Loiu), Munabe (Loiu) Eskibel (San Sebastián) y Erain (Irun). Entre todos estos centros se vienen manejando unos volúmenes superiores a los 3.000 alumnos.

Todas estas escuelas quedarán fuera de la financiación pública si finalmente se rubrica el preacuerdo alcanzado entre morados, jeltzales y socialistas. Son los únicos colegios que seguro que se verán afectados, pero la concreción del resto de exigencias que se fijen también podrían afectar a otros centros educativos según apuntan fuentes moradas a 'Crónica Vasca', todo dependerá de cómo siga el Plan Estratégico de la Escuela Pública que han acordado crear las tres formaciones y que también deberá pasar por el Parlamento vasco con una nueva negociación.

Sea como sea, fuentes consultadas por este diario señalan que no será posible que los colegios del Opus Dei se escapen de esta exigencia como intentaron hacer los centros cercanos a esta organización religiosa en Navarra. Allí el concierto pactado con el Gobierno foral incluía el fin de la segregación, pero a comienzos de curso esa práctica solo se dio entre los alumnos de primero de Primaria. En el caso de la futura ley educativa vasca, sería ahí cuando entrarían en juego las demás exigencias para dejar fuera a las escuelas de la financiación. Esta redacción ha contactado con el grupo COAS, que agrupa a cuatro de esos seis colegios, pero han declinado comentar en qué situación les deja estos requisitos. En 2020 el Gobierno vasco subvencionó con 11 millones de euros el concierto de los seis colegios que aún segregan por sexos en Euskadi.

Miren Gorrotxategi (Podemos) e Iñigo Martínez Zatón (IU) anuncian el fin de la concertación universal en la escuela vasca / EUROPA PRESS

El borrador que provocó la huelga 

El borrador anterior a este acuerdo fue el que provocó que este martes los sindicatos anunciasen una huelga para pedir una educación "pública, euskaldun y propia". Durante la presentación de este preacuerdo, Miren Gorrotxategi era preguntada este miércoles sobre esta huelga. La portavoz de Elkarrekin Podemos se limitaba a mostrar su respeto a la decisión sindical y su deseo de que "si finalmente se cierra un acuerdo satisfaga los intereses de los sindicatos". La ley, según los partidos, busca que el euskera sea el eje de la educación en Euskadi, pero a los sindicatos no parece satisfacerles. En cuanto a la publificación de la escuela vasca, Elkarrekin Podemos pedía que se pase de un balance al 50% entre pública y concertada a un 65% de pública frente a un 35% de concertada. Algo que el preacuerdo no incluirá así, pero que los morados consideran que sí podrá conseguirse con las medidas anunciadas por la coalición.

El preacuerdo, además de la gratuidad de las haurreskolas, también recoge elaborar una normativa que permita la publificación de los colegios privados que respondan a las necesidades de planificación de la administración educativa. Además, el plan estratégico para la pública apostará por consolidar plantillas, renovar las infraestructuras escolares y ampliar el número de plazas públicas en las zonas de mayor densidad poblacional.