Madre e hija / Freepik

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Sociedad

Una madre estalla ante las altas temperaturas en Euskadi: “Mi hija de dos años no puede dormir. En casa es imposible”

Muchas viviendas en Euskadi no están preparadas para el calor, ya que las temperaturas extremas no son habituales  y carecen de sistemas de climatización

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La reciente ola de calor que afectó a España, y por ende a Euskadi, ha dejado consecuencias importantes. Hace algunos días, ya se denunciaba que muchos trabajadores estaban soportando condiciones extremas durante su jornada laboral.

Entre los más afectados, algunos centros de salud de Osakidetza reclamaban medidas urgentes al Servicio Vasco de Salud para enfrentar las altas temperaturas y los problemas de calor en las instalaciones.

En otros sectores, como la construcción o la agricultura, se ha optado por adaptar los horarios de trabajo: se empieza más temprano para evitar las horas más calurosas del día.

Lo cierto es que en Euskadi no es habitual enfrentar temperaturas tan altas, y no solo los trabajadores se han visto afectados. Muchas viviendas no están preparadas para el calor, ya que no cuentan con sistemas de climatización.

El cambio climático ya está causando impactos visibles. Las altas temperaturas llegan antes y son más intensas. De hecho, este ha sido uno de los junios más calurosos registrados. Según Euskalmet, la Agencia Vasca de Meteorología, junio fue un mes “extremadamente cálido”, el más caluroso desde 1970, con temperaturas similares a las del año 2003.

"En casa es imposible estar"

Esto demuestra que las viviendas deben adaptarse al nuevo contexto climático. Durante esta ola de calor, muchas casas alcanzaron temperaturas de entre 28 y 30 grados. Una vecina contaba que su vivienda llegó a los 30ºC: “Fue una noche muy dura. Mi hija de dos años casi no durmió, y nosotros tampoco. En casa es imposible estar”.

Muchos vecinos no estaban preparados y tuvieron que improvisar soluciones: usar ropa ligera, poner hielo delante del ventilador o simplemente esperar a que pasara el calor.

Esta situación ha provocado que la demanda para instalar sistemas de climatización como un aire acondicionado aumenten y este proceso no es tan sencillo, ya que hay normativas estrictas, por ejemplo, que impiden colocar unidades en las fachadas principales.

La unidad exterior de un aparato de aire acondicionado, instalada en la fachada de una casa. / Freepik

La unidad exterior de un aparato de aire acondicionado, instalada en la fachada de una casa. / Freepik

La Consejería de Vivienda ya trabaja con las medidas de climatización 

Por eso, las nuevas obras públicas ya tienen en cuenta este escenario. Desde la Consejería de vivienda son consciente de la realidad a la que se enfrenta Euskadi en los últimos años y han incorporado medidas de cara al futuro.

“En obra nueva, el Gobierno vasco, en toda vivienda que está protegida que está construyéndose en estos momentos, está siendo muy cuidadosa desde el punto de vista de garantizar el confort térmico de los usuarios”, ha asegurado Denis Itxaso, consejero de Vivienda.

Medidas para combatir las olas de calor

  • Beber mucha agua fresca constante, es decir, cada 15-20 minutos, aunque no tengas sed. Esto es importante para prevenir la deshidratación.
  • Buscar zonas de sombra, descansar y reponer fuerzas. Para ello, si es necesario por las altas temperaturas, es recomendable aumentar la frecuencia de las pausas.
  • Usar ropa ligera y de colores claros
  • Proteger la cabeza con sombrero o gorra
  • Evitar las horas más calurosas y las tareas más pesadas durante las horas de más calor y, si es posible, utilizar maquinaria para reducir el esfuerzo físico.