Las empresas del Puerto de Bilbao invertirán más de 60 millones hasta 2025

El Puerto de Bilbao es una ciudad en constante evolución. Los límites físicos pondrán acotarán el avance del hormigón sobre el mar una vez se complete la última ampliación en marcha y, a partir de ahí, habrá que medir con escuadra y cartabón cualquier movimiento para sacar el máximo partido a la principal instalación portuaria de Euskadi.

El entramado empresarial en torno al puerto vizcaíno genera más del 8% del PIB vasco con un impacto en la recaudación fiscal incluso mayor. Por su relevancia, la Autoridad Portuaria ha tratado de ser siempre exigente con las compañías que ocupan parte de las instalaciones y les ha reclamado compromiso e inversiones, una política aun más afilada de cara a este último reparto de suelo una vez se complete el espigón central.

El ejemplo más reciente fue la falta de acuerdo para colocar una segunda terminal de contenedores, un proyecto que volvió a caer en saco roto el año pasado, ya en fase de concurso público y con navieras interesadas en atracar en Bilbao, porque no había suficientes garantías de éxito. "No queríamos cualquier cosa", explicó Ricardo Barkala, máximo responsable del puerto.

A cambio, el portugalujo ha logrado que las empresas que ya operan en los muelles de Santurtzi den un paso al frente, y no solo Cosco (CSP Iberian), principal operador de contenedores. Las cifras de inversiones previstas para este año y 2025, que van más allá de las cuatro compañías que integran Bilboestiba, dan cuenta de un ecosistema vivo que, por otro lado, vive muy pendiente del futuro de su potente bloque energético que encabeza Petronor.

El presidente de Petronor, Emiliano López Atxurra. / EP EP

Estiba y almacenamiento

La refinería de Repsol es uno de los motores de la inversión privada en zona portuaria y lo será también este año inmersa ya en algunos de sus principales proyectos para reducir las emisiones que miran a largo plazo. Más allá de los desencuentros entre la cúpula de Repsol y el Ejecutivo central, la planta de biocombustibles con Aramco sigue adelante (la energética de Josu Jon Imaz ha comenzado a producir ya fuel verde en Cartagena) como avanza también el proyecto para instalar un electrolizador de 100 MW que cubra buena parte de su demanda energética con hidrógeno.

Petronor concentra así parte de los más de 60 millones de euros que está previsto invertirá el tejido empresarial en el Puerto de Bilbao en proyectos que discurrirán entre este año y 2025, según datos de Uniport, el clúster de firmas portuarias. A la refinería de Emiliano López Atxurra se suman la propia CSP Iberian, además de Toro y Betolaza, Bergé y SLP (las cuatro compañías de Bilboestiba), y otras dedicadas al almacenamiento y transporte como Deposa (graneles líquidos), Bunge Ibérica (alimentación), Tepsa (químicas) o Exolum (Compañía Logística de Hidrocarburos, CLH).

Las inversiones irán dirigidas a la renovación de maquinaria y equipos, principalmente, así como la mejora y ampliación de terminales e instalaciones.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Ricardo Barkala

Por otro lado, y aunque las obras se iniciaron el pasado año, Haizea Wind, una de las grandes promesas del puerto, tiene en marcha la ampliación de sus pabellones situados en el espigón de Zierbena para dar salida a los nuevos contratos de monopilotes para eólica marina.

Además, la Autoridad Portuaria ha anunciado para 2024 un paquete cercano a los 80 millones de euros repartidos en diversos proyectos, los más destacados la mencionada segunda fase del espigón central, cuyas obras se licitarán próximamente y podrían comenzar en la parte final del año, y el arranque en el muelle A-5 del proyecto para suministrar electricidad a los buques.