Ha pasado ya la primera semana de campaña y las elecciones del próximo 28 de mayo están cada vez más cerca, lo que lleva a los grandes partidos políticos con presencia en Euskadi y a sus candidatos a aventurarse, ahora sí, en una carrera por ver quién lanza más propuestas, mensajes e iniciativas con las que atraer a todo el electorado posible que todavía no se ha decidido por una opción u otra.
Sin embargo, pese a la gran cantidad de mítines en los que han participado no solo quienes buscan llegar a la Alcaldía en los municipios vascos, o al cargo de Diputado General en cualquiera de los tres territorios; sino también gran cantidad de figuras propias de la política nacional que son protagonistas en la actualidad o lo han sido en el último año, el gran tema que ha inundado la inmensa mayoría de los actos de campaña ha sido el de los 44 condenados por pertenencia o vinculación con ETA presentes en las listas de EH-Bildu para Euskadi y Navarra.
Así, incluso en los actos donde participaron nombres de gran calibre como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el secretario general del PP, Alberto Núñez Feijóo; la líder de Podemos a nivel nacional, Ione Belarra; o el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, parecía que todo, o casi todo, tenía relación con la banda terrorista como si esto fuera lo único sobre lo que se va a votar el próximo 28-M. Un debate que incluso protagonizó la campaña de otras muchas comunidades autónomas que nada tienen que ver con la coalción soberanista, Euskadi, ni la polémica que se había originado y que parece, por fin, haberse dejado a un lado. A pesar de que hay quienes todavía insisten en mantener vivo el debate.
El candidato de EH Bildu a diputado general de Bizkaia, Iker Casanova, junto a la candidata a la Alcaldía de Bilbao, Maria del Rio / Fernando Gómez - Europa Press
Vivienda, juventud y transporte
Superado este capítulo de la campaña, a excepción de algunos sectores del PP que poco tiene que ver con las candidaturas de la Comunidad Vasca, los partidos políticos tienen en esta segunda y última semana previa al 28-M un escenario excepcional para mostrar las propuestas e iniciativas que debían haber presentado desde hace ya varios días y erigirse como la mejor opción dentro de su municipio o diputación.
En concreto, uno de los temas que más protagonismo ha vuelto a recibir en los últimos días, y que desde hace meses se presentaba como uno de los más importantes para atraer el voto vasco, es el de la vivienda, y en especial el del alquiler asequible y dirigido a la población joven de Euskadi, que siguiendo la tónica nacional no cesa en sus protestas por tener acceso a una vivienda y a un alquiler que no les arrebate el 50% o más de su sueldo.
Así, igual que hace unas semanas hizo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al prometer la construcción de 20.000 viviendas de alquiler social, en estos días no han faltado los anuncios de la gran mayoría de los partidos políticos de Euskadi en torno a este mismo tema. Desde el PNV, la candidata a la Alcaldía de Vitoria, Beatriz Artolazabal, mostraba su intención poner en el mercado 2.000 viviendas para los barrios de Salburua y Zabalgana; algo similar a lo que hizo Juan Karlos Izagirre, candidato de EH-Bildu en San Sebastián, quien se comprometió a la construcción de 7.000 nuevas viviendas en la capital guipuzcoana.
Más allá de la vivienda, de la que no faltan promesas, no son pocas las propuestas que involucran de alguna u otra forma a la población más joven de Euskadi, un sector muy numeroso, compuesto por ciudadanos que votan por primera o segunda vez y que puede ser fundamental para hacerse con un escaño extra. Por ello, desde el PSE, Bildu y Podemos tratan de mostrar su faceta más reivindicativa y "progresista", para así llamar la atención del público joven, mediante propuestas centradas en becas de estudios; en el acceso al mercado laboral; y especialmente en el acceso a un alquiler asequible.
A estas promesas se suman también un gran numero de iniciativas planteadas en torno al trasporte y las infraestructuras necesarias para su funcionamiento. Así, se dan propuestas que van desde un bono mensual para que los jóvenes y los estudiantes puedan moverse libremente en Álava por 25€ -a iniciativa de Elkarrekin Podemos-, o la de mantener los descuentos en el transporte público de Bilbao -a iniciativa del PSE-; hasta otras que apuestan por la movilidad sostenible en las grandes ciudades de Euskadi, como la promesa de Artolazabal de duplicar los puntos de carga de coches eléctricos en Vitoria; las que piden mejorar el transporte entre público entre localidades para "acabar con el desequilibrio territorial"; y aquellas que apuestan por el desarrollo de redes ferroviarias en Euskadi.