Maddalen Iriarte se despidió del Parlamento, pero a medias

Hace más o menos una semana la hasta ahora portavoz de EH-Bildu en el Parlamento vasco, Maddalen Iriarte, salía ganadora durante las elecciones del 28-M en la Diputación General de Gipuzkoa, en una batalla que se preveía ajustada contra el PNV y su candidata Eider Mendoza, pero donde finalmente la líder abertzale se impuso. A lo mejor, incluso, para su propia sorpresa, por lo que estamos viendo... 

La victoria, que al parecer no va a tener un final muy feliz, es posible que le fuera tan repentina a Iriarte que resulta que se le ha olvidado devolver su acta como parlamentaria en la Cámara vasca. No hace intervenciones ni acto de presencia, pero a ojos de la institución sigue siendo parte del grupo de la coalición soberanista. 

Aunque en 'defensa' de la política abertzale, ella no es la única que se encuentra en esta "incómoda" situación. Como cuenta Iker Rioja en ElDiario.es, sus compañeros de partido hacen lo mismo: Iker Casanova, que concurrió como candidato a las Juntas Generales de Bizkaia; y Unai Fernández de Betoño, número dos en la lista a Vitoria encabezada por Rocío Vitero, tampoco han abandonado oficialmente el Parlamento, aunque todos ellos se despidieron en su momento ante la mirada pública. Contradictorio, cuando menos. 

Esto puede parecer una mera anécdota o una curiosidad, pero como todo rumor y toda historia que tenga un poco de gracia -y todavía más en la política- es muy comentada por quienes se van enterando. No es para menos en este caso. En los pasillos del Parlamento vasco no son pocas las voces que hablan sobre la "doble vida" de Iriarte, Casanova y Fernández de Betoño, quienes parecen aferrarse a su acta parlamentaria -y quizás a la nómina- hasta que se queden sin fuerza o hasta que sea completamente incompatible el hecho de que estén ocupando un cargo en el que ya no trabajan. 

Pese a no participar ya de la vida parlamentaria, si están en esta situación es porque es algo legal, y si deciden ser parte ambas instituciones serán ellos quienes valoren hasta que punto son compatibles sus funciones. Pero más allá de esto, cada uno debe ser consecuente con lo que dice y hace, y eso de estar despidiéndose del Parlamento, pero solo a medias, quizás no sea lo más adecuado. A esta confidente, sin ir más lejos, le llovieron chuzos de punta por mucho menos en su momento...  

También es verdad que Iriarte y Fernández de Betoño están a la espera de saber si finalmente serán parte de los Ejecutivos de Gipuzkoa y Vitoria, respectivamente. Tal vez piensan conservar su acta (y su nómina), si PNV y PSE acaban por arrebatarles ambos gobiernos, pero quizás también deberían echarse a un lado para dejar el paso a nuevos nombres que sí sean de utilidad en la vida parlamentaria.

Y ya de paso, EH-Bildu podría decidir quién va a sustituir a Iriarte como portavoz parlamentaria, o a lo mejor Nerea Kortajarena, quien debería ser su reemplazo lógico y natural, solo está calentando el asiento de Iriarte para que no se enfríe hasta que ella vuelva.