Sumar: el partido 'fantasma' en Euskadi que aún busca un puesto para su candidata

El estreno de Sumar Mugimendua en las pasadas elecciones vascas del 21 de abril no fue especialmente bueno. La lista encabeza por Alba García Marín logró tan solo un escaño que, de hecho, no fue para su candidata sino para Jon Hernández Hidalgo, primero en la plancha por Álava y donde la coalición magenta obtuvo su único representante en el Parlamento vasco. 

El caso es que, Hernández, secretario general del Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK) y parlamentario por Ezker Anitza-IU ni siquiera pertenece a la estructura de Sumar. Y aunque su partido forma parte de la coalición que se presentó a las autonómicas, realmente los de Yolanda Díaz no cuentan, por ahora, con ningún cargo propio en la Cámara de Vitoria. Ni si quiera Alba García a quien ahora están tratando de encontrar un sitio junto a Hernández. 

Desde Sumar ya aseguraron el pasado viernes 3 de mayo, cuando Hernández presentó su acta como parlamentario, que García iba a trabajar en el equipo de la Cámara vasca sí o sí. Ya fuera como asesora o con un cargo externo. Pero pasada ya una semana desde aquellas declaraciones, desde Sumar no dan detalles sobre cuál es su intención o lo fórmula por la que su candidata a lehendakari continuará su actividad política en el Parlamento vasco. "No hemos cerrado aún cómo trabajaremos, pero será en equipo. Es un proyecto a medio largo plazo y un compromiso que va más allá de haber sacado el acta de parlamentaria", insistió García aquel viernes. 

Sin embargo, la otra cuestión está en el valor añadido que García pueda darle a Sumar a la hora de trabajar desde el Parlamento, y si no sería mejor darle un cargo dentro del propio partido tras ese proceso de estructuración que todavía tienen pendiente. Porque más allá de la coalición registrada para las elecciones del 21-A, y las generales del 23-J, la formación magenta apenas tiene recorrido en Euskadi.

Por esta razón, más allá del Parlamento vasco, Sumar no tiene un espacio donde 'colocar' a García y garantizarle un puesto en la actividad política vasca. Pero la opción de no mantener a quien, a su juicio, "está llamada a liderar el espacio de la izquierda confederal vasca" en esta nueva etapa no parece una posibilidad que se hayan llegado a plantear. 

El objetivo de Sumar Mugimendua, al parecer, es hacer de su candidata a lehendakari la imagen del partido en Euskadi. Especialmente con Lander Martínez, su secretario general, como diputado por Bizkaia en el Congreso, y con el resto del partido formado por figuras todavía poco reconocidas. Todo lo contrario a lo que ocurre con Elkarrekin Podemos que, pese a quedarse fuera de la Cámara vasca el pasado 21-A, cuenta aún con nombres de relevancia en el panorama político vasco como Pilar Garrido o Miren Gorrotxategi. 

Una nueva hoja de ruta

En este escenario de incertidumbre, Sumar dio esta semana los primeros pasos para preparar su hoja de ruta para la próxima legislatura. Lo hizo este jueves en el Parlamento vasco en un encuentro donde participaron representantes de las cuatro formaciones que conforman la coalición: Sumar Mugimendua, Ezker Anitza-IU (partido al que pertenece el parlamentario Jon Hernández), Berdeak-Equo y Más Euskadi Eraiki.

Este encuentro, el primero en el que coincidieron los cuatro partidos para abordar su estrategia parlamentaria, dejó en claro una cosa. El duro papel que va a tener que soportar Jon Hernández los próximos cuatro años. No solo por ser el único representante de cuatro fuerzas políticas con matices y recorridos muy diversos, sino porque no va a poder participar en todas las comisiones parlamentarias. De hecho, al estar en el grupo mixto junto a la representante de Vox, Amaia Martínez, solo tendrá acceso a la mitad. Un reparte que hará la mesa del parlamento y que todavía no se conoce. 

Otro de los problemas que ronda en las conversaciones de la coalición magenta -o por lo menos debería hacerlo- gira en torno a la capacidad de representación e influencia que su único parlamentario, y por ende Sumar, va a tener durante esta legislatura. Porque de nuevo, a falta de grandes sorpresas PNV y PSE-EE volverán a pactar un Gobierno de coalición y volverán a tener mayoría absoluta en el Parlamento, por lo que el voto de Hernandez y los esfuerzos de su partido serán irrelevantes. 

Sobre esto, García, tras el encuentro del jueves, se comprometió a que Sumar seguirá con atención "los posibles acuerdos para la conformación del Gobierno vasco" y aseguró que "es responsabilidad del PNV y el PSE" atender a los retos que la ciudadanía -y ellos mismos- trasladaron durante la campaña. 

"Nosotros nos ponemos a trabajar para revertir las políticas del Gobierno vasco, sobre todo cuando parece que se va a revalidar el mismo gobierno que ya teníamos, con caras nuevas, pero con las mismas políticas. Queremos empezar a plantear oposición desde la crítica, pero también desde la propuesta política", matizo Hernandez tras el encuentro en el Parlamento.