Imagen de la regasificadora Bahía Bizkaia Gas (BBG) en el Puerto de Bilbao / EP

Imagen de la regasificadora Bahía Bizkaia Gas (BBG) en el Puerto de Bilbao / EP

Empresas

Petronor y Bahía Bizkaia Gas devuelven el pulso al Puerto de Bilbao tras el bache del verano

El tráfico de gas y petróleo crece un 25% en septiembre y consolida el aumento total de mercancías en 2023 tras los 'pinchazos' de julio y agosto

7 noviembre, 2023 05:00

Noticias relacionadas

Se acerca el invierno y el Puerto de Bilbao, de marcado perfil energético, mejora sus números gracias a dos de sus actividades fetiche: el gas y el refino de crudo. Tras un verano a la baja a nivel de tráficos, tanto Petronor, que viene de un periodo con un nivel de actividad inferior al de 2022, como Bahía Bizkaia Gas (BBG) abren el otoño con fuerza y sitúan de nuevo el crecimiento de las mercancías totales del puerto en el entorno del 3%, el nivel de la primera mitad del año.

No es un avance demasiado brillante pero, teniendo en cuenta sobre todo la crisis de tráficos que atraviesan el resto de grandes ciudades portuarias, puede decirse que Bilbao está salvando bien una coyuntura delicada. A tres meses para cerrar 2023 el ecosistema portuario ubicado en Santurtzi tiene gracias a este empujón de septiembre margen para terminar el año en positivo mientras Algeciras, Barcelona y Valencia, los tres primeros puertos españoles, pierden tráfico.

El balance de hecho a cierre de septiembre de toda la red de Puertos del Estado es negativo (-4,0%), curiosamente con buenos números en un puñado de dársenas ubicadas en el arco atlántico-cantábrico, en teoría principales competidoras de Bilbao y Pasaia (los más próximos, Gijón y Santander, crecen un 6 y un 12% en los tres primeros trimestres). El puerto guipuzcoano por su parte mantiene la buena dinámica con un avance del 5,6% hasta septiembre, algo más corto que en verano, en ese camino hacia el objetivo de recuperar los 4 millones de toneladas anuales.

Volviendo al puerto bilbaíno, 2023 apunta a un nuevo ejercicio con luces y sombras. Luces porque en última instancia la actividad de carga y descarga crece en un escenario complicado. Y sombras porque en la balanza sigue pesando mucho el apartado energético, Petronor y BBG, que ya el año pasado fueron los que "tiraron del carro" en palabras del propio Ricardo Barkala, presidente de la Autoridad Portuaria. El contenedor o el ro-ro (carga rodada), siguen sin despegar.

El presidente del Puerto de Bilbao, Ricardo Barkala, en la presentación de datos de tráfico de 2022 / CV

El presidente del Puerto de Bilbao, Ricardo Barkala, en la presentación de datos de tráfico de 2022 / CV

Nuevas rutas y 'presión' a las terminales

Y eso que desde la propia Autoridad Portuaria se están haciendo esfuerzos por lograr engordar los números de este tipo de mercancía más tradicional. A principios de año se recuperó por ejemplo la ruta directa y periódica (semanal) con la costa este de EEUU, país que ha ido ganando mucho peso entre los socios comerciales internacionales de las empresas vascas, de hecho es el principal fuera de Europa. También se ha reforzado el servicio de la ruta Europa Atlántica-Marruecos de WEC Lines.

Avances que llegan al calor del acuerdo laboral sellado con los estibadores el pasado verano y que garantiza la paz social en los muelles para los próximos años. Un acuerdo de corte estratégico, según el equipo de Barkala, que debe servir para recuperar la confianza de los operadores y lograr una mejora de los volúmenes de mercancías que, por ahora, se hace esperar.

Y las instalaciones portuarias se preparan para ese tirón. Varias empresas tienen en marcha ampliaciones e inversiones para aumentar su capacidad (Toro y Betolaza ha solicitado más espacio en el muelle A-6), todo ello tras no concretarse el proceso para poner en marcha una segunda terminal de contenedor. A cambio de no abrir la puerta a competidores, la Autoridad Portuaria logra arrancar eso sí compromisos de permanencia a la filial de Cosco (CSP Iberian), que invertirá 45 millones en Bilbao hasta 2027, según la publicación de Uniport Bilbao.

Planta de Petronor / EUROPA PRESS

Planta de Petronor / EUROPA PRESS

Evolución de Petronor

Tanto el tráfico del Puerto de Bilbao como el conjunto de la balanza comercial de Bizkaia y de Euskadi están siempre muy condicionadas por la evolución de Petronor. La refinería de Muskiz, que anunciaba recientemente que deja "en stand by" algunas de sus inversiones, apunta a un septiembre de cierta reactivación tras meses a la baja respecto a un buen 2022, según los datos de movimientos portuarios.

Según datos de Puertos del Estado el tráfico de graneles líquidos, principalmente el crudo que entra a Petronor para salir en forma de combustible y el gas de BBG, creció en Bilbao un 25% en septiembre, un acelerón que saca de la atonía de los últimos meses a este tipo de mercancías. Hasta agosto los números de actividad que manejaba la compañía de Emiliano López Atxurra no eran buenos, algo que estaba pesando mucho en la curva de las exportaciones vascas.

La regasificadora BBG, segundo agente clave en el puerto bilbaíno, ha mantenido un buen nivel de actividad todo el año y en septiembre habría alargado esa dinámica. La planta vizcaína era la que más volumen de gas sumaba hasta agosto de todas las regasificadoras de Enagás (el 23% del total nacional) pese a la reapertura de la planta de El Musel, en Asturias.