El PNV intenta desmarcarse del caso De Miguel y espera que siga sin afectarle en las urnas
Urkullu y Ortuzar vuelven a pedir perdón por el escándalo, pero al mismo tiempo aseguran que su partido "nada tiene que ver", defienden a sus militantes y anuncian la expulsión definitiva de los condenados
11 enero, 2023 05:00La sentencia sobre el escándalo De Miguel supone un torpedo en la línea de flotación del PNV. Porque el Tribunal Supremo condena a exdirigentes peneuvistas que se valieron de su cargo público y contrataron con administraciones también gobernadas por los jeltzales. Ante esa evidencia, en Sabin Etxea y Ajuria Enea intentan desmarcarse del caso y esperan que, como hasta ahora ha ocurrido, no les pase factura en las urnas.
Este mismo martes, después de conocerse la decisión del Alto Tribunal, desde los cuarteles peneuvistas movían ficha. El propio lehendakari, Iñigo Urkullu, afirmaba en una mensaje en las redes sociales que ratificaba sus palabras del pasado sobre este caso. No puede olvidarse que en noviembre de 2019, al conocerse el fallo primigenio de la Audiencia Provincial alavesa, el jefe del Gobierno vasco pidió "disculpas a la sociedad" por estos hechos.
Perdón y desmarque
Justo lo mismo hizo entonces el presidente del PNV, Andoni Ortuzar. Y este martes, el partido hegemónico en Euskadi rememoraba aquellas comparecencia y volvía a pedir perdón a la ciudadanía vasca: "Hoy renovamos esa disculpa ante el conjunto de la sociedad". Eso sí, también al igual que entonces, los peneuvistas intentaban desmarcarse con claridad del caso señalando los comportamientos de los condenados como hechos ajenos al partido.
Es cierto que la formación no ha sido condenada ni juzgada por estos hechos. Y es igualmente cierto que los condenados se valieron de sus cargos en el partido y contrataron con municipios e instituciones controladas también por el partido. Por ello la oposición en bloque lanzaba este martes fuertes acusaciones contra el partido gobernante.
El desmarque de los jeltzales era palmario: "La sentencia relata unas actitudes y actos que nada tienen que ver con EAJ-PNV. Al contrario, siempre tendrán a este partido enfrente. La acción política que practica EAJ-PNV va dirigida a mejorar la vida y el bienestar de la colectividad vasca". Incluso en su comunicado rebautizaban el caso De Miguel como "caso Miñano", algo muy comentado en todos los mentideros políticos y mediáticos.
Los condenados serán expulsados
El PNV recordaba además que ya "hace más de doce años" los ahora condenados "entregaron sus carnés y fueron apartadas de sus responsabilidades públicas e internas". Tiempo en que la afiliación de los burukides ha estado suspendida cautelarmente. "Una vez que la sentencia es firme, se procederá a incoar el expediente definitivo de expulsión ante el correspondiente tribunal interno, en cumplimiento de los Estatutos vigentes".
Además, el partido presidido por Ortuzar defiende a su militancia al destacar "la honestidad y la entereza de miles de mujeres y hombres de EAJ-PNV, de cargos públicos e internos que dedican su tiempo y el de su familia, su bienestar y su capacidad de progreso al servicio público".
Las urnas y el nulo efecto
Más allá de las declaraciones públicas, lo cierto es que en el PNV siguen pensando que este escándalo está amortizado. Porque consideran que los ciudadanos saben distinguir entre los comportamientos de unas pocas 'ovejas descarriadas' y del resto de dirigentes, por mucho que la oposición al completo hable de 'modus operandi' habitual, de clientelismo o de corrupción generalizada.
La verdad es que en Sabin Etxea y Ajuria Enea tienen motivos para creer que el caso no pasará factura en las elecciones municipales, forales y generales de este año tan electoral. El antecedente es claro. Porque la sentencia de la Audiencia Provincial, de noviembre de 2019, no impidió que unos pocos meses después, en julio de 2020 y en plena pandemia, los peneuvistas obtuvieran un resultado magnífico en las elecciones autonómicas.